Acuerdo con supermercadistas

El gobierno logró sentar a los empresarios para poner fin a la falta de productos en las góndolas. Se anunciará un nuevo gabinete.

El gobierno del presidente venezolano Nicolás Maduro contará por primera vez con la ayuda del sector privado para «garantizar el buen funcionamiento de un sistema logístico de distribución de alimentos» que le permita, de ese modo, combatir el acaparamiento y desabastecimiento de productos básicos que sufre el país. El ministro de Alimentación, Hebert García Plaza, dijo al término de una reunión con los ejecutivos de cadenas de supermercados estatales y privadas que unos y otros aceptaron «sumarse a los esfuerzos de la Revolución Bolivariana para garantizar el abastecimiento de los productos de la canasta alimenticia».
El anuncio de García Plaza se conoció días después de que Maduro generara expectativas al hablar de un «sacudón para mejorar nuestra eficiencia». Los analistas imaginaron primero un plan de ajustes para enfrentar las dificultades económicas. Luego, optaron por las estimaciones apocalípticas al divulgarse que el gabinete ministerial en pleno –más de 30 secretarios de Estado– había presentado su renuncia para facilitar los cambios que el mandatario «estime necesarios».
García Plaza explicó que en el encuentro con el sector empresarial, que se realizó en la sede del Círculo Militar, en Caracas, se trataron ocho puntos «fundamentales», entre los que destacó la «garantía de abastecimiento de acuerdo a los niveles de consumo, para que todas las personas tengan acceso a los productos». Según dijo, las partes también coincidieron en la decisión de «trabajar en una estrategia junto con la Superintendencia de Precios Justos para la reposición de inventarios» (el mantenimiento de los stocks).
El ministro agregó que se va «a coordinar con el Ministerio de Comunicación e Información una campaña de concientización en los supermercados, para que los consumidores se sumen a la lucha contra el contrabando», un capítulo vital iniciado la semana pasada, después de que los presidentes Maduro y Juan Manuel Santos (Colombia) acordaran reforzar la seguridad de la vasta frontera. Ese acuerdo está orientado a evitar el contrabando de los combustibles y los alimentos subsidiados por Caracas.
El Instituto Nacional de Estadística del Banco Central de Venezuela (BCV) mide regularmente el desabastecimiento de productos básicos desde marzo de 2003, un mes después de que el gobierno impusiera un rígido control cambiario. Históricamente, la producción nacional satisfizo sólo una parte del consumo de productos básicos. El vicepresidente, Jorge Arreaza, recordó en marzo pasado que la industria local cubre apenas el 40% de la demanda. El último reporte del BCV indicó que el desabastecimiento pasó de 22,2% a 28% entre diciembre y enero pasados.