Advierten que el recorte real que tendrán que hacer las provincias es de $46.000 M

«Estas dos alternativas son las únicas existentes para discutir el ajuste necesario de gasto. O se lo hace sobre el valor de 2019 o se lo hace sobre el valor de 2018. No tiene sentido plantear el ajuste del gasto de 2019 en moneda del año 2018. Eso agrega confusión a la discusión, complicando el entendimiento del verdadero recorte necesario», critica el reporte elaborado por el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf).

Para el think tank cordobés, esto cambia la cifra que le tocará recortar a las provincias, que llega a un tercio del total. En el caso de que se lo mida sobre el gasto de 2019, llega a $120.000 millones pero si es en base a este año, suma $46.330 millones.

Tomando como referencia este último caso, el ajuste se repartiría de la siguiente manera: la derogación de $22.316 millones del Fondo Federal Solidario, conformado con los ingresos de las retenciones a la soja, y $24.000 millones menos en transferencias a las provincias, corrientes y de capital, por $12.000 millones cada una. El reparto del ajuste entre las distintas jurisdicciones se realizaría siguiendo el criterio de los coeficientes de coparticipación, según la propuesta que hizo el Ejecutivo a los gobernadores.

Lo cierto es que el Gobierno deberá concentrar el recorte en las partidas «no automáticas», que excluyen las que están indexadas automáticamente por ley por inflación como las asignaciones familiares y las jubilaciones, las cuales avanzarían 29% contra el 21% que se prevé crezcan los precios en promedio durante el año que viene. Así, el «gasto social» pasaría del 10,38% al 10,95 del producto en 2019. Por lo tanto, el resto de los rubros (salarios, transferencias a provincias, obra pública y subsidios económicos) deberán caer en términos nominales un 11,3%.

«La primera conclusión que se obtiene es que en lugar de ejecutar un nivel de gasto primario de $3.251.679 millones durante 2019, hay que ejecutar uno de $2.891.137 millones. Como el gasto primario automático tiene un nivel determinado de $1.796.422 millones, todo el ajuste necesario recae sobre el gasto no automático, que debe caer en $360.542 millones, alcanzando un valor de $1.094.715 millones en 2019», reza el documento del Iaraf.

El memorándum de entendimiento con el FMI fija un déficit fiscal primario del 1,3% del PBI para el 2019 y del 2,7% en 2018. Esto hará que el gasto primario «no automático» deba caer 2,2 puntos más de lo previsto en relación al producto, de acuerdo al centro de estudios.