Argentina despidió a sus ídolos dorados

Emanuel Ginóbili se mostró orgulloso por haber formado parte de la llamada «Generación Dorada» y dijo que «fue un placer haber jugado en este equipo».

«A los 39 años el haber tenido esta última oportunidad de jugar por Argentina en los Juegos Olímpicos fue muy lindo», indicó el mejor basquetbolista argentino de todos los tiempos, visiblemente emocionado.

‘Manu’ comentó además que «fueron 104 partidos» los que «jugué con la selección, siempre contribuyendo para que el equipo juegue bien», manifestó uno de los pilares de la ‘generación dorada’ .

Algo melancólico, sostuvo que «fueron casi 20 años jugando con la selección argentina, aunque alguna vez no juegue», recordando que, por ejemplo, no pudo participar del torneo pre olímpico por padecer una molestia física, aunque igual viajó a México para estar con el plantel en las semifinales y finales.

«Me siento feliz por todo lo que me tocó vivir», puntualizó ‘Manu’, aunque haya «pasado por momentos muy altos y otros muy duros en distintas competencias».

Con relación con esta última participación con la selección albiceleste, el crack de los San Antonio Spurs sostuvo «siempre el primero y el último partido son inolvidables», en su brillante carrera que como seleccionado la inició en el Mundial de Atenas de 1998.

Desde 1995, cuando se trasladó desde su Bahía Blanca natal a La Rioja para debutar con Andino en la Liga Nacional, el 29 de septiembre de ese año frente a Peñarol de Mar del Plata, su carrera se jalonó de grandes éxitos con brillantes actuaciones en el ámbito nacional como internacional, pasando por la Liga de Italia, donde se consagró como uno de los mejores jugadores de Europa, con el Kinder Bologna en el 2000.

Dos años después, pasó a San Antonio Spurs para constituirse en una de las grandes figuras de la NBA hasta la actualidad, mientras que con Argentina lograba numerosas conquistas, entre ellas, las medallas de oro en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004; en el torneo FIBA Diamond Ball, en Nankín 2008 y en dos oportunidades en el Campeonato FIBA Américas, en Argentina 2001 y 2011.

En referencia a la eliminación argentina de esta noche en manos de los Estados Unidos, Ginóbili sostuvo que «se sabía como era ésto, lamentablemente no se pudo pasar», ello a consecuencia de que «no había que cometer errores y los cometimos», reconoció.

Por último, el gran ‘Manu’ afirmó «fui un afortunado en vivir todo lo que despertó esta selección», como lo fueron los que disfrutaron de sus grandes actuaciones, de sus grandes hazañas, que lo convirtieron en un «basquetbolista incomparable».