Casanello remitió a otros jueces la declaración de Leonardo Fariña

EL JUEZ REMITIÓ A DISTINTOS JUZGADOS PARTE DE LA DECLARACIÓN DEL ARREPENTIDO LEONARDO FARIÑA, QUE DEVINO EN LA IMPUTACIÓN A CRISTINA KIRCHNER Y EL EX MINISTRO JULIO DE VIDO EN LA CAUSA POR LA RUTA DEL DINERO K, QUE YA TIENE PRESOS AL EMPRESARIO LÁZARO BÁEZ Y A SU CONTADOR, DANIEL PÉREZ GADÍN.

El magistrado envió copias a los jueces Julián Ercolini, Daniel Rafecas y Marcelo Martínez de Giorgi para que se incorporen los testimonios de Fariña a causas que éstos llevan adelante. Casanello señaló que parte del relato de Fariña «abarca hechos que ya están siendo investigados».

En su presentación voluntaria ante la Justicia, Fariña hizo referencia a un «plan sistemático (de la administración kirchnerista) cuyo objeto fue el vaciamiento de las arcas públicas mediante la obra pública». El escrito de Casanello fue publicado por el Centro de Información Judicial, que es la agencia de noticias del Poder Judicial.

Según el juez, Fariña, que está imputado en la causa (esto es, no prestó juramento ni promesa de decir verdad) estructuró su declaración básicamente en dos puntos: una primera parte que el mismo imputado caracterizó de «valoración personal» y una segunda parte en la que hizo referencia a los hechos de la investigación, en la cual aportó «varios datos relativos a las operaciones que habría realizado a fines de 2010 y comienzos de 2011» (compra de SGI Argentina, giros de divisas al exterior).

Esa parte del relato -señala Casanello- «estaba basada en la experiencia personal (de Fariña), en sus vivencias».

Según relata el juez, Fariña explicó que existía una estructura para la adjudicación fraudulenta de obra pública que involucraba al Ministerio de Planificación Federal, a la Cámara Argentina de la Construcción y a la SIGEN, entre otros organismos, y que favorecían a las empresas de Lázaro Báez y de Carlos Wagner (presidente de la C.A.C.), tales como Austral Construcciones, Gotti, Kank y Costilla, Sucesión de Adelmos Biancalani, ESUCO, etc. Añadió la participación en el esquema de la AFIP, la UIF y el Banco Central.

«No sólo ello, sino que también sugirió que la complicidad se extendía hasta el Poder Legislativo», dice Casanello que dijo Fariña, cuando éste abordó cómo se aprobaban en el Parlamento los presupuestos que permitían el financiamiento para las obras».

Fariña también aludió a la asignación de áreas petroleras a empresas de Báez (Epsur y Misahar), a la licitación de la represa Cóndor Cliff, entre otras irregularidades; incluida la emisión del fideicomiso financiero en Nación Fideicomisos («asunto en el que (Fariña) sí habría tenido intervención directa», señaló Casanello).

En otro párrafo, el juez aseguró que la primera parte del relato de Fariña «merece un análisis aparte porque en gran medida abarca hechos que ya están siendo investigados» por el juez Julián Ercolini.

Casanello hace referencia a la causa que en 2008 se inició en virtud de una denuncia de Elisa Carrió, Adrián Pérez y una decena de diputados más, que entonces hicieron referencia a la «matriz de la corrupción» entablada por una asociación ilícita cuyo jefe «sería el ex presidente Néstor Kirchner».

El fiscal de este caso, Gerardo Pollicita, cuando resolvió los fundamentos que fundamentaban aquella acción penal, había señalado que los ilícitos cometidos habrían comenzado desde fines de 2003 y que en general se vinculan a los contratos de obra pública llevados adelante desde el Estado «con un grupo reducido de empresas».

Fuera de esta causa, Fariña también realizó comentarios sobre distintas investigaciones que se encuentran en curso desde hace varios años. «Allí también habré de remitir testimonios», adelantó Casanello.

«Como se sabe, desde hace un tiempo, los Tribunales Superiores han desplegado mecanismos para evitar lo que se conoce como forum shopping, que se traduce en la elección discrecional y amañada de un determinado juez para llevar adelante un asunto», aseveró Casanello.

Los aportes de Fariña, concluyó el juez, en caso de corroborarse, «permitirán un gran avance en la investigación acerca del dinero negro que habría manejado Báez y las complicidades con las que contó.