Crisis económica: explotan cheques rechazados y denuncian quiebre de la cadena de pagos

En los primeros cuatro meses de 2018, la cantidad de papeles rechazados llegó a 550.000, unos 87.000 más que en el mismo lapso del año pasado.

En total acumularon un monto de $21.000 millones, un volumen 50% por encima al delprimer cuatrimestre de 2017.

La crisis cambiaria, la inflación y la caída del consumo son flajelos que hacen crecer el clima de incertidumbre.

 

El gerente de una importante empresa mayorista relató a iProfesional algunos pormenores que caracterizaron a los comercios estas últimas semanas:

– Algunas fábricas recibieron pedidos extras por parte de sus clientes para evitar el incremento de valores. «La típica entrega a precio viejo antes del ajuste», detalló.

– Lo que no pronosticaron es que sus ventas caerían. En algunos casos se habla de un verdadero desplome, ahora no pueden hacer frente a las mayores compras de productos.

– Aquellas compras de tipo «defensivas» quedaron impagas en muchos casos. A eso se debe el incremento -al menos en parte- de la cantidad decheques rechazados.

– Las empresas que buscaban sacarse de encima stocks y «invitando» a sus clientes a adelantar compras a precios «viejos», terminaron enredadas en una estrategia en la que se quedaron sin los productos y sin el efectivo.

– Ante esto, algunos fabricantes líderes acortaron los plazos de pago de la mercadería. De los 30 días (máximo) que se permitía hasta la devaluación, la redujeron a la condición de 4 a 12 días.

– El Gobierno, mientras tanto, afirma que ya tomó nota de los problemas que empiezan a vislumbrarse por la incertidumbre y la menor actividad.

En el mes de abril, las ventas minoristas ya mostraban una leve tendencia bajista debido a la inestabilidad cambiaria.

Según CAME, las ventas de abril se contrajeron 3% en comparación al mismo mes de 2017. La desconfianza de los consumidores se reflejó en un estudio llevado a cabo por la Universidad Di Tella: el índice de Confianza al Consumidor (ICC) cayó 21% en relación a mayo del año pasado y 10% respecto de abril último.

La turbulencia cambiaria está teniendo un fuerte impacto en el ánimo y sobre todo en el bolsillo de los consumidores.