Cuba acusó a EEUU por la crisis migratoria

CUBA ACUSÓ A ESTADOS UNIDOS POR EL CONFLICTO QUE SE GENERÓ CON INMIGRANTES ILEGALES QUE SE ENCUENTRAN EN COLOMBIA PARA TRATAR DE LLEGAR A SUELO ESTADOUNIDENSE, AL TIEMPO QUE CONFIRMÓ LA LLEGADA DEL PRIMER GRUPO DE CIUDADANOS DE LA ISLA QUE FUERON DEPORTADOS EL SÁBADO POR BOGOTÁ.

Estados Unidos “politiza” el tema migratorio y estimula una emigración “ilegal e insegura”, denunció este domingo La Habana.

Asimismo, la Dirección de Asuntos Consulares y de Cubanos Residentes en el Exterior del Ministerio de Relaciones Exteriores (Minrex) de la isla, informó que a los 14 cubanos deportados «se les realizó el control sanitario internacional establecido y están siendo trasladados a sus provincias de residencia».

«Esas personas salieron de Cuba legalmente hacia diferentes países de América Latina y el Caribe, cumpliendo los requisitos establecidos por las regulaciones migratorias cubanas», señaló el comunicado divulgado por la agencia de noticias EFE.

Los ciudadanos cubanos que hayan salido legalmente del país y cumplan con la legislación migratoria vigente, tienen derecho a retornar a Cuba.

Los deportados son parte de un grupo que en su mayoría permanece hacinado en una bodega en la localidad colombiana de Turbo, en la región caribeña del Urabá, fronteriza con Panamá, donde un número indeterminado de migrantes de la isla se amontonó con el propósito de llegar a Estados Unidos.

Las autoridades colombianas advirtieron los a los inmigrantes ilegales que permanecen en el municipio de Turbo, que los que no salgan voluntariamente del territorio nacional serán deportados a su país de origen o a la nación por la que ingresaron a Colombia.

La Cancillería de la isla denunció que en el intento de llegar a territorio estadounidense los cubanos «se convirtieron en víctimas de traficantes y de bandas delincuenciales que operan en la región».

Por esa razón sostiene que estos ciudadanos son «víctimas de la politización» del tema migratorio por parte de Estados Unidos, que «estimula una emigración ilegal e insegura», a través de la Ley de Ajuste Cubano, vigente desde 1966, la política de «pies secos-pies mojados», y del «Programa de Parole para profesionales médicos cubanos».

«Esa política constituye una violación de la letra y el espíritu de los acuerdos migratorios entre Cuba y los Estados Unidos, mediante los cuales ambos gobiernos asumieron la obligación de garantizar una emigración legal, segura y ordenada», afirmó el comunicado.

Y la considera «incongruente» con el actual contexto bilateral, tras el deshielo diplomático entre La Habana y Washington, porque está «obstaculizando» la normalización de las relaciones migratorias bilaterales y creando problemas a otros países.

La crisis de inmigrantes, no sólo cubanos sino también haitianos, se desató a raíz de la búsqueda de éstos por arribar a suelo estadounidense a través de la frontera mexicana.

Para eso, llegan a territorio colombiano, desde allí cruzan a Panamá y finalmente al norte de México, donde utilizan a las bandas de traficantes que cobran fortunas por hacerlos ingresar a Estados Unidos, algo que muy pocos logran.

La razón de los cubanos por elegir esta vía es parte de la denuncia del gobierno cubano: la ley implementada en 1996 y conocida como “pies secos-pies mojados”, por la cual si un cubano es detenido en el mar intentado ingresar a Estados Unidos es deportado a Cuba, pero si logra poner un pie en tierra firme logra su residencia.

Esa norma fue ampliada a los cubanos que ingresan por la frontera mexicana, razón por la cual a los famosos “balseros” que intentaban llegar por mar al Estado de Florida se agregaron los que lo hacen a través de lo peligrosos desiertos de Sonora y Chihuahua.

A principios de año una oleada de inmigrantes cubanos había provocado una crisis en Centroamérica cuando miles de personas se juntaron en Costa Rica, situación que concluyó tras un acuerdo diplomático con su traslado vía aérea y terrestre a México, para que continuaran viaje a Estados Unidos.