Cuba y Estados Unidos prevén iniciar los vuelos comerciales

COMO SECUENCIA, SE PERMITIRÁN HASTA 20 VUELOS DIARIOS DIRECTOS DESDE ESTADOS UNIDOS A LA HABANA Y 10 MÁS A OTROS NUEVE AEROPUERTOS INTERNACIONALES CUBANOS, ENTRE ELLOS SANTIAGO DE CUBA, MANZANILLO Y CAMAGÜEY, INDICÓ EL SUBSECRETARIO DE ESTADO ADJUNTO PARA ASUNTOS DE TRANSPORTE, THOMAS ENGLE.

El gobierno de Estados Unidos anunció hoy un acuerdo con Cuba en materia de aviación civil, por el que se espera que comiencen «en otoño» los vuelos comerciales directos entre las dos naciones.

«En total, podrían alcanzarse un máximo de 110 vuelos directos entre Estados Unidos y Cuba. Pero obviamente esto dependerá de la demanda del mercado», agregó Engle en una conferencia telefónica, en la que detalló que la firma del memorando será el martes en La Habana.

Además, explicó que el acuerdo permitirá continuar con las operaciones de compañías chárter ya existentes, que realizan entre 10 y 15 vuelos diarios a Cuba.

El gobierno estadounidense abrirá ahora la convocatoria para que las aerolíneas puedan presentar sus propuestas, de la que queda excluida, por el momento, Cubana de Aviación hasta que consiga autorización por parte del Departamento del Tesoro, y tomará una decisión sobre los permisos otorgados para cubrir estas rutas «en verano».

«Si no hay problemas, los primeros boletos podrían venderse en otoño», subrayó el funcionario estadounidense.

El memorando de entendimiento será firmado el martes con la participación del secretario de Transporte de EEUU, Anthony Foxx, y su homólogo cubano, Adel Yzquierdo.

Este acuerdo se enmarca en el proceso en marcha de restablecimiento de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba.
El 17 de diciembre de 2014, los presidentes de Estados Unidos, Barack Obama, y de Cuba, Raúl Castro, anunciaron el inicio de un proceso para normalizar las relaciones bilaterales que desembocó, en julio pasado, en la reapertura de las respectivas embajadas en La Habana y Washington.

No obstante, pese al progresivo deshielo, todavía quedan temas muy complejos por resolver, como las compensaciones económicas mutuas, y persisten importantes diferencias entre los dos países en asuntos como inmigración y derechos humanos.

En cuanto al bloque económico sobre la isla, aunque Obama ha tomado medidas ejecutivas para flexibilizar los viajes y algunas transacciones comerciales, su levantamiento completo depende del Congreso de Estados Unidos, controlado hoy en su totalidad por los republicanos, que se oponen mayoritariamente a su eliminación.