El Papa habló de la Justicia en la Argentina

Cuando sobrevolaba el territorio argentino, el papa Francisco le envió ayer a la presidenta Cristina Kirchner un telegrama con un saludo protocolar y una expresión de «afecto a esta querida nación». Transmitió, además, un pedido elevado «al Señor» para que «le permitan progresar en los valores humanos y espirituales, acrecentando el compromiso para la justicia y la paz».

La sutil mención al «compromiso para la justicia» en su «amada patria» se produjo durante el vuelo entre Bolivia y Paraguay, cuando la Argentina transita un grave conflicto entre el gobierno de Cristina Kirchner y el Poder Judicial por la remoción de jueces y el reemplazo por magistrados y abogados de confianza de la Casa Rosada. La tensión se expresó el martes último con una multitudinaria marcha de reclamo en el palacio de Tribunales.

El telegrama no fue difundido por la Casa Rosada y ningún funcionario hizo comentarios sobre él. Consultado un alto funcionario por LA NACION, le restó importancia a la referencia sobre la justicia, y señaló que «el mensaje fue tomado como un saludo protocolar y formal».

La Presidenta, que permaneció ayer todo el día en Olivos, viajará hoy, a las 20, a Paraguay para participar de la última etapa de la gira del papa Francisco. Cristina asistirá mañana a la misa que el Santo Padre celebrará en Ñu Guazú ante una multitud.

En diálogo con periodistas en Asunción, el vocero papal, padre Federico Lombardi, dijo que no sabía si habrá un encuentro privado entre el Papa y Cristina Kirchner. Señaló que siempre se informa de los encuentros privados después de que ocurren. y que, ante la eventualidad de que se concrete, estimaba que sería corto. «Un Papa puede tener una relación mas intensa con el presidente de su país, es algo normal, como Juan Pablo II la tenía con Walesa», dijo.

Integrarán la comitiva oficial el vicecanciller Eduardo Zuaín; el secretario de Culto, Guillermo Oliveri; el secretario general de la Presidencia, Eduardo «Wado» De Pedro; el embajador ante la Santa Sede, Eduardo Valdés, y el vocero presidencial, Alfredo Scoccimarro. El canciller Héctor Timerman no irá en la comitiva por problemas de salud.

«Todos los telegramas dirigidos a los países latinoamericanos tuvieron una redacción similar», dijo un funcionario vinculado a la Cancillería.

El telegrama estaba encabezado con la leyenda «Sorvolo Argentina» (sobrevuelo Argentina) y su texto completo fue: «Al sobrevolar la amada patria argentina para dar comienzo a mi visita pastoral a Paraguay, me alegra enviar un cordial saludo a vuestra excelencia, expresando mi cercanía y afecto a esta querida nación, para la que le pido al Señor copiosas gracias que le permitan progresar en los valores humanos y espirituales, acrecentando el compromiso para la justicia y la paz. Francisco».

Llamó la atención la expresa referencia a la justicia, dos semanas después de que la mayoría kirchnerista en el Consejo de la Magistratura removió al juez Luis María Cabral de la Sala I de la Cámara de Casación Penal y lo reemplazó por el abogado kirchnerista Claudio Vázquez, como juez subrogante.

Al ser consultado el padre Lombardi sobre si el avión sobrevoló la Argentina a pedido de Francisco, dijo que no, que «ya estaba previsto y no fue decisión del Papa».

El envío de telegramas a los jefes de Estado de los países que sobrevuela el avión papal, un Airbus A330 de Alitalia, es una tradición vaticana que Francisco continúa con su propio estilo. El domingo pasado envió mensajes de cortesía a los presidentes de Venezuela, Nicolás Maduro, y de Colombia, Juan Manuel Santos, cuando volaba rumbo a Ecuador.

En cada texto hubo referencias sutiles a los contextos políticos y económicos de los países. Por ejemplo, en el mensaje transmitido a Maduro pedía «progresar cada día más en solidaridad y pacífica convivencia», en momentos en que Venezuela atraviesa una profunda crisis política y social. «Me es grato enviar un cordial saludo a vuestra excelencia, manifestando mi afecto y cercanía por el pueblo venezolano, a la vez que pido al Señor abundantes gracias que le ayuden a progresar cada día más en solidaridad y pacífica convivencia», escribió el Papa.

En el saludo a Santos, señaló que «el Señor derrame abundantes gracias por profesar en los valores espirituales y humanos la reconciliación y convivencia pacífica».

La referencia a la «reconciliación» obedece, según se interpretó, a que el gobierno de Santos y la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) negocian un acuerdo de paz en La Habana.

Cuando se dirigía a Bolivia, le envió un telegrama al presidente de Perú, Ollanta Humala, en el que escribió: «Pido al Señor abundantes gracias que lo hagan progresar en los valores sociales y espirituales, acrecentando el compromiso por la justicia, la solidaridad y la paz».