Flamengo va por la doble corona y Río prepara un multitudinario recibimiento

Río de Janeiro protagonizó un multitudinario recibimiento al Flamengo, flamante campeón de la Copa Libertadores 2019, con una fiesta que podría alargarse hasta la noche si el equipo carioca logra el doblete este domingo y gana también el Brasileirao.

Centenares de miles de seguidores del equipo más popular de Brasil salieron a las calles de Rio de Janeiro para dar la bienvenida al nuevo campeón continental, al estilo de los grandes bloques de Carnaval que cada año hay en la «Ciudad Maravilhosa» y que arrastran incluso a millones de seguidores.

Desde primera hora, miles de aficionados vestidos con la camiseta rojinegra del equipo ya se concentraban en la famosa plaza de la Candelaria, en el centro de la ciudad y que será uno de los puntos por los que pasará el autocar descapotable con el que desfilarán los jugadores ante la afición.

El equipo llegó al aeropuerto internacional de Río de Janeiro antes del mediodía las y, posteriormente, la expedición desfiló por la céntrica Avenida Presidente Vargas para mostrar el título a sus aficionados.

La Policía Militarizada de Río montó un amplio dispositivo de seguridad y pidió a los aficionados que no se desplacen al aeropuerto para dar la bienvenida al equipo para no bloquear los accesos a las instalaciones.

Por la doble corona

La fiesta podría prolongarse hasta bien entrada la noche si el Flamengo se proclama este domingo campeón del Brasileirao, título que levantó por última vez en 2009.

Gracias a la arrolladora temporada del «Mengao», que lidera con comodidad la clasificación, el Palmeiras, segundo en la tabla, está obligado a ganar los cinco partidos que le quedan para evitar que el Flamengo se proclame campeón brasileño.

Si el Palmeiras no consigue vencer en casa al Gremio de Porto Alegre este domingo, el Flamengo se convertirá automáticamente en ganador del Brasileirao.

El equipo que dirige el portugués Jorge Jesús se proclamó este sábado campeón por segunda vez en su historia de la Copa Libertadores tras ganar en la final disputada en Lima al River Plate argentino por 2-1.