Gravier investigado

La medida fue confirmada por la Sala 4 de la Cámara de Apelación. Bajo sospecha están además sus padres.

El empresario Alejandro Gravier, marido de la ex modelo Valeria Mazza, fue procesado junto con sus padres por la Sala 4 de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional, en el marco de una causa en la que se los acusa falsificar un contrato de locación con fines de evasión impositiva. La dependencia judicial dispuso «el procesamiento de Horacio Alfredo Gravier, Alejandro Jorge Gravier y María Cristina Cirio por considerarlos partícipes necesarios del delito de uso de documento público falso», de acuerdo a lo que expresa el dictamen de los jueces Mariano González Palazzo, Carlos Alberto González y Alberto Seijas, informó ayer la página InfoJus.

El documento en cuestión es un contrato de locación que se habría usado en una operación para evadir impuestos. El texto cuenta con la firma de un escribano público que los investigadores sindican como falsa. En el marco del mismo caso ya está procesada la contadora Ana Jost, acusada de haber presentado ante la AFIP los documentos que se cuestionan. La maniobra, según el texto judicial, se habría cometido por medio de las compañías Vamagra S.A. y La Soñada S.A. Los accionistas de esas firmas son Mazza y Alejandro Gravier.

Tras conocerse la noticia, el empresario emitió un comunicado en el que se desligó de la acusación judicial. De acuerdo con el mensaje, «Gravier (sic) ha sido víctima de una maniobra urdida por un ex escribano, hoy prófugo de la Justicia, y ha sido sorprendido en su buena fe al descubrir que un protocolo notarial en el que se le certificaron firmas, en realidad, había sido robado previamente», explicó.
El documento insiste en que el empresario «no tiene ningún proceso por presunta evasión tributaria ni deuda alguna con la AFIP» y agrega que «la misma Cámara del Crimen que en dos oportunidades resolvió no procesarlo ante un sobreseimiento de un Juez de Primera Instancia, ahora dicta el procesamiento por presunta utilización de un documento público falso».

Fuentes de la AFIP aseveraron, al margen del delito de falsificación, que «no hay ninguna denuncia por evasión impositiva contra Alejandro Gravier»: el empresario «no tiene ninguna deuda con el fisco», precisaron las fuentes. En esa línea, el pronunciamiento del marido de Mazza agrega que «esta imputación carece de todo sentido, ya que Alejandro Gravier ni ningún familiar han participado ni activa ni pasivamente de maniobra alguna, sino que además no ha obtenido beneficio alguno por el hecho. Las distintas empresas que conforman el Grupo Familiar, se encuentran al día, y no deben impuestos como erróneamente alude la información».

Finalmente, el empresario advirtió que «el contrato de alquiler cuya certificación notarial está siendo hoy puesta en duda se inició hace 14 años y continúa vigente a la fecha», concluye. Y añade que la decisión del juez «no es definitiva y está sujeta a los recursos que contra la misma proceden, los que serán presentados a la brevedad».