La ex de Maradona, durísimo con el diez

La ex pareja de Diego Armando Maradona, Verónica Ojeda, debutó anoche en el Bailando por un Sueño, conducido por Marcelo Tinelli, y se refirió al conflicto que actualmente la enfrenta a su ex pareja por la exposición del hijo que tuvieron juntos, Diego Fernando Maradona.

La expectativa comenzó ayer, cuando Tinelli bromeó con el bozal legal implementado por Maradona que impide la mención de su nombre o la de su hijo. Tinelli, para referirse al ex futbolista, elegía decir «Diego Armando Mumumumu…».

Además, el conductor había reprochado la medida judicial por comprometer su libertad de expresión. Hoy, apenas pisó la pista de baile, Verónica Ojeda expresó su enojo. «¿No puedo nombrar a Diego Fernando Maradona Ojeda? Es una locura. Lo tuve en mi panza, vive conmigo. No lo traje porque yo no lo quise traer, no por esta medida», desafió Ojeda.

«Estoy muy triste. Yo al nene lo llevo a todos lados. Siempre está conmigo. Esto era importante para mí, para mi vida y para el nene y mi familia», confesó la ex de Maradona con un marcado tono enojado.

Además, Ojeda se presentó con su abogado, junto a quien informó cómo se implementó el bozal: «fue una jueza, Viviana Romero, que ya me ha hecho una cautelar hace un año y ahora me la vuelve a rectificar», explicó.

«Qué casualidad que haya caído en el mismo juzgado. Tiene un detector de cautelares», ironizó Tinelli.

«Yo tengo el mismo derecho que el padre. El año pasado lo mostró el padre en un programa de Brasil. Yo acepté porque venía de una medida cautelar y para que podamos mostrarlo los dos. Fue un acuerdo de palabra y se las llevó el viento», remató Ojeda.

«Él lo mostró en diciembre a todos los medios, y yo no lo puedo mostrar. Yo tomo esto como un trabajo. Casi me niego a venir al Bailando por todo esto. Hablé con mi familia y decidí hacerlo para demostrar lo que puedo hacer, él no decide por mí», agregó.

«Yo no soy una madre que le prohíbe ver al nene. Yo hago todas las cosas para que lo vea. No puede decir nada de que yo lo prohíbo o cualquier cosa. Todo lo contrario», finalizó.