Las hijas de Obama no tienen «clase»

Elizabeth Lauten, directora de comunicaciones de un congresista republicano, comunicó su decisión durante una entrevista con el canal de televisión NBC, después de la polémica suscitada durante el fin de semana por sus dichos.

Una asesora legislativa del Partido Republicano renunció hoy a su puesto luego de decir que las hijas del presidente estadounidense, Barack Obama, no tenían «clase», en comentarios por los que recibió numerosas críticas.

Elizabeth Lauten, directora de comunicaciones del congresista republicano Stephen Fincher, comunicó su decisión durante una entrevista con el canal de televisión NBC, después de la polémica suscitada durante el fin de semana por sus dichos.

En una entrada en su perfil de Facebook, que se convirtió en viral, Lauten señaló que Sasha y Malia deberían de haber mostrado «un poquito de clase» durante la ceremonia anual del indulto del pavo previa a la festividad del Día de Acción de Gracias, el jueves pasado en la Casa Blanca.

«Queridas Malia y Sasha, sé que ambas están en esos terribles años de la adolescencia, pero son parte de la familia presidencial, intenten mostrar un poquito de clase», escribió Lauten, citada por la agencia de noticias EFE.

«Vistan como si merecieran respeto», no como «en un bar», continuó Lauten, quien también pidió a las hijas del presidente «no hacer caras durante actos públicos televisados».

En la ceremonia, a la que acudieron junto a su padre, Malia, de 16 años, llevaba una minifalda de cuadros con un jersey gris, mientras que Sasha, de 13, lucía un vestido corto de color marrón con una chaqueta larga encima.

A última hora del sábado, cientos de internautas habían pedido en la red social Twitter que Lauten fuera despedida de su trabajo, pese a que ella borró los comentarios de su Facebook y escribió una nota de disculpa.

La asesora pidió perdón y señaló que, «después de muchas horas de oración» y de hablar con sus padres, se dio cuenta de lo «dañinas» que fueron sus palabras sobre las hijas del presidente.

Las críticas de Lauten han sido las más cuestionadas, pero no las únicas, ya que tras la ceremonia de indulto al pavo, celebrada el miércoles pasado, varios medios comentaron los gestos y expresiones de Malia y Sasha, y afirmaron que parecían «aburridas» e incluso molestas por tener que estar allí.