Macri llegó al Cortile de San Dámaso (el patio desde donde ingresó a la sede papal) a las 9.30 hora local y mantuvo una audiencia privada de 22 minutos con Francisco, a lo que luego se sumó otro rato junto a la comitiva que lo acompañó y el intercambio protocolar de regalos, lo que llevó la duración a media hora.

Fueron parte de la delegación oficial la primera dama, Juliana Awada; el jefe de gabinete, Marcos Peña; la canciller, Susana Malcorra; el secretario de Asuntos Estratégicos, Fulvio Pompeo y el embajador ante el Vaticano, Rogelio Pfirter, además de los gobernadores Juan Manuel Urtubey (Salta), Rosana Bertone (Tierra del Fuego) y Alfredo Cornejo (Mendoza).

Si bien fuentes diplomáticas admitían que el encuentro había tenido una rigurosa duración como es habitual (reconociendo que si hubiera durado más habría sido un gesto especial que no existió), aseguraron a Télam que la delegación estaba «satisfecha».

«Fue lo que se esperaba y a partir de ahora el vínculo irá mejorando cada vez más», comentaron.

En una rueda de prensa en la embajada argentina, Macri se refirió al encuentro: «Estoy muy contento con la reunión. Fue volver a reencontrarnos dos viejos conocidos en un rol que era imposible de imaginar algunos años atrás: él obispo de Buenos Aires y yo alcalde de la Ciudad; y hoy él Papa y yo representando a todos los argentinos».

«Tuvimos una agenda de conversación sobre el momento que se vive en la Argentina y las cosas que pasan en el mundo y ratificar la vocación de que para aquello que podamos colaborar en conjunto, estar en contacto como corresponde a la relación de años que tenemos», agregó el mandatario.

El Presidente dijo que se continuará «interactuando en conjunto e intensamente con la Iglesia argentina que tiene tanta penetración en la realidad social y es importante interactuar todos en esta lucha contra el narcotráfico y en este intento por ir a la pobreza cero».

Sobre una posible visita a nuestro país, Macri dijo que lo invitó y que «sería una alegría» su llegada, a lo que el Papa le respondió que «este año no será, pero será lo antes posible», dando a entender que podría ser en 2017.

El presidente Macri se reunió con el Papa en el Vaticano

Además, Macri sostuvo que dialogaron «en forma general de la importancia de que tengamos en la agenda, como puntos fundamentales, la unión de los argentinos, la lucha contra la pobreza y el narcotráfico» y que el Papa «acordó» con él en que «es muy importante que la Argentina vuelva a restablecer relaciones con el mundo, que sea creíble y confiable para entrar un proceso de atraer inversión, y eso trae trabajo».

«Necesitamos que el flujo de capitales que la Argentina necesita tenga en cuenta a las personas, que no las descarte», coincidieron ambos, relató Macri.

Al finalizar, el Presidente enfatizó: «(Francisco) me dijo que tenga paciencia y que no dude en enfrentar los problemas graves de fondo que tiene la Argentina, entre los que mencionó el narcotráfico y la corrupción».

Luego, Macri mantuvo un encuentro con el secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, con quien dialogó más sobre «la situación regional, y se mencionó mucho la coyuntura de Venezuela y Brasil», informaron a Télam fuentes oficiales.

En diálogo con Télam, Fulvio Pompeo recalcó «la sintonía plena entre el Papa y el Gobierno en la lucha contra la corrupción y el narcotráfico» y aseguró el compromiso del oficialismo «en trabajar con la Iglesia en el combate a la pobreza».

Inmediatamente después, Macri y la delegación partieron rumbo al Palazzo Chigi, sede del gobierno italiano, para reunirse por segunda vez en dos semanas con el primer ministro Matteo Renzi, quien lo felicitó por «el avance que hubo en la solución» del conflicto con los holdouts y también ultimaron detalles de cara a una «misión comercial de empresarios e inversores italianos que vendrá a la Argentina en junio próximo», explicó Pompeo a Télam.

«El Presidente habló de llevar adelante una nueva ola migratoria de Italia hacia la Argentina, pero ahora de empresarios y emprendedores. También se destacó el modelo de las PyMES italianas», agregó Pompeo, y destacó como «política de Estado» el renovado acercamiento con Italia.

En tanto, fuentes de la comitiva que participaron del encuentro confirmaron a Télam que Renzi se mostró favorable a la posibilidad de que la cumbre del G20 en 2018 se lleve a cabo en Argentina, en lo que sería la primera vez que un país latinoamericano oficie de anfitrión de ese club de naciones.

Tras también reunirse con el presidente italiano, Sergio Mattarello en el Palazzo Quirinale y mantener un almuerzo protocolar, Macri al Hotel de Russie donde se quedará hasta las 19 (15 de Argentina), cuando partirá hacia el aeropuerto Fuimicino para emprender el retorno a Buenos Aires en un vuelo de Alitalia.