Murió la duquesa de Alba

Cayetana Fitz-James Stuart tenía 88 años y ostentaba la mayor colección de títulos nobiliarios de toda España. Había sido hospitalizada el domingo por un cuadro por demás complicado.

Cayetana Fitz-James Stuart, más conocida en el mundo por su título nobiliario de duquesa de Alba, falleció este miércoles en la ciudad de Sevilla (España), donde se encontraba afectada desde el último domingo a raíz de su complicado estado de Salud.

La mujer, que contaba con 88 años de edad al momento de su deceso, ostentaba una de las mayores fortunas del mundo, y también 46 títulos nobiliarios, lo que la convertía en la persona que poseía la mayor cantidad de esos documentos en toda España.

La duquesa, que había requerido servicios médicos el domingo donde le detectaron un cuadro de gastroenteritis, neumonía y una arritmia cardiaca, se encontraba al momento de su muerte en su residencia del Palacio de Dueñas, en Sevilla, rodeada de sus seis hijos y de su último marido, Alfonso Díez Carabantes, además de otros familiares y amigos.

La decimoctava duquesa de Alba era una de las mujeres más ricas de España, gracias a sus grandes extensiones de olivares y campos, y además poseía un importante patrimonio artístico que incluye pinturas, esculturas o tapices, de artistas como Zurbarán, Fray Angélico, Goya, Murillo, El Greco, Veronés, Van Dyck, Velázquez o Ribera, entre otros.

En 1953, tras la muerte de su padre, Cayetana se convirtió en la 18va duquesa de Alba, y en la tercera mujer que ostentó este título en más de quinientos años.

En 2012, su popularidad aumentó notablemente alrededor del mundo a raíz de su boda –la tercera de toda su vida- con el funcionario Díez Carabantes, 25 años menor que ella, y su particular rostro dio vueltas en fotografías alrededor del mundo.

La boda despertó polémica porque los hijos de la duquesa reclamaban que se repartiera la herencia de la mujer, cuya fortuna se estima entre los 850 millones y 5.000 millones de dólares, debido a que pensaban que Díez Carabantes era un «cazafortunas».