Oficializaron el envío de tropas a Colombia para supervisar la paz

Con la publicación de la ley 27.282 en el Boletín Oficial, este martes quedó oficializado el envío de tropas de las tres fuerzas armadas a la república de Colombia para colaborar en la supervisión del proceso de desarme de las FARC, de acuerdo con lo establecido en el tratado de paz que firmaron el presidente Juan Manuel Santos y los líderes guerrilleros.

La norma promulgada indica en su artículo 1°: «Autorízase la salida del territorio nacional de medios, personal militar, de seguridad y vinculado a la colaboración humanitaria y social, destinado a cumplir con el eventual requerimiento de la ONU para participar en el proceso de paz…».

En su artículo 2°, la norma establece que, previo al efectivo envío de las tropas, el Ministerio de Defensa remitirá la nómina del personal destacado a la misión y que no será necesaria ninguna otra autorización por parte del legislativo.

En los fundamentos del proyecto -incluidos en el anexo que acompaña la publicación oficial- se define a la tarea como «una misión política con el proceso de paz en Colombia y su apoyo al acuerdo de paz firmado en La Habana, Cuba». Asimismo, la determinación se apoya en diversas resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU y de los propios instrumentos de paz suscriptos por las partes en conflicto. En el armado inicial de la misión, se contempló un contingente «Argentino Chileno», al mando del General de Brigada Carlos Alfredo Pérez Aquino, quien desde marzo es el Comandante Operacional del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas.

Con la verborragia propia de este tipo de instrumentos legales, la justificación de la misión se apoya en factores no solo políticos, sino además «estratégicos y operativos (sic)». Los considerandos establecen que las tropas argentinas intervendrán en el proceso de paz a partir del 26 de septiembre de 2016 y hasta tanto se mantenga la vigencia del mandato de la «Misión política de la ONU en Colombia». Taxativamente, se indica que «no se contempla el envío de medios» (es decir, vehículos u otro tipo de equipamiento militar) aunque la norma promulgada sí lo contempla.

A diferencia de otras misiones realizadas en el marco de resoluciones de la ONU, esta será financiada íntegramente con recursos de Estado Nacional. En este sentido -y teniendo en cuenta que el proceso de ratificación popular del acuerdo de paz fue adverso- en diversos ámbitos de la defensa y las relaciones exteriores de la nación surgieron todo tipo de especulaciones respecto de la implementación de esta «comisión militar», que además comprende la participación de civiles de distintas disciplinas.

En un principio, se estableció que el contingente estuviera integrado por 150 militares, de los cuales Argentina aportaría 75 y Chile otro tanto. Este personal sería relevado cada 180 días y presupone una erogación de aproximadamente 1.500.000 dólares mensuales.

No obstante, fuentes del Ministerio de Defensa consultadas por Infobaeaclararon que el hecho de que el Congreso hubiera autorizado el envío de tropas no implica necesariamente que las mismas zarpen en forma inmediata hacía Colombia. Por otra parte, en Cancillería avalan estos conceptos al sostener que «el resultado adverso al tratado durante la consulta popular» pone a todo el operativo de la ONU en pausa y ello comprende también a la actuación de nuestra fuerza binacional.

ARGENTINA EN LAS MISIONES DE PAZ

En los últimos años las Fuerzas Armadas Argentinas vienen cumpliendo con rotundo éxito misiones de paz en diversos puntos del planeta. Haití y Chipre suenan como las más emblemáticas, pero también se han desarrollado múltiples actividades de ayuda humanitaria en casos de emergencias naturales y catástrofes.

Por lo general las misiones de paz son solventadas con recursos provenientes de Naciones Unidas y el personal militar que participa es previamente entrenado en el Centro de Operaciones de Paz «CAECOPAZ», que tiene su base de operaciones y entrenamiento en la guarnición militar de Campo de Mayo.

Hace pocos días el presidente Maurico Macri encabezó la ceremonia de despedida de un nuevo contigente militar para Haití, luego de años en los que un Jefe de Estado en su carácter de Comandante en Jefe no tomara contacto con el personal militar afectado a este tipo de tareas.

EL PRESIDENTE RECIBIRÁ A LA FRAGATA LIBERTAD

Asimismo, fuentes consultadas por este medio indicaron que Macri recibirá en persona a la Fragata Libertad el 5 de noviembre en el apostadero naval Buenos Aires. El buque escuela regresará al país luego de un periplo de más de cinco meses. Durante ese lapso, la embarcación volvió a los tradicionales viajes por todos los mares del mundo sin temores a un embargo por parte de los acreedores del país. En esta ocasión, la «Libertad» tocó puertos de Sur y Norteamérica y Europa.