Punto de partida histórico

El presidente de la República Popular China, Xi Jinping, aseguró, en el marco de su visita al Congreso de la Nación, que su país está «dispuesto a hacer esfuerzos para que más productos argentinos ingresen al mercado chino» y ratificó su compromiso para «trabajar en la reforma del sistema financiero internacional», según consignó Tiempo Argentino.

Julián Domínguez, presidente de la Cámara Baja, y Amado Boudou, en su carácter de titular del Senado,recibieron ayer por la mañana al presidente de la potencia asiática en el Palacio Legislativo. En el encuentro, que se extendió por 45 minutos, Xi Jinping describió la bilateral que mantuvo el viernes con la presidenta Cristina Fernández como «muy fructífera» y destacó el hecho de que la relación entre ambas naciones haya llegado al nivel de «asociación estratégica».

Xi también recordó la poca superficie cultivable que tiene China, y en ese sentido expresó la necesidad de asegurar «entendimientos duraderos» con la Argentina que posee «abundantes recursos agrícolas». Aclaró que «el superávit comercial no es un objetivo» para China, por lo que la apertura del mercado asiático a más productos no necesitará de la importación argentina.

En ese marco, el vicepresidente Amado Boudou también destacó la «asociación estratégica integral» que une a la Argentina con la República Popular China, y subrayó que se trata del resultado de las «relaciones» que se profundizaron «durante estos diez años».

Como parte del Poder Ejecutivo, Boudou agradeció el acompañamiento de China en la causa Malvinas, y remarcó el respaldo de Argentina «al concepto de una sola China». Además, manifestó su agradecimiento por el apoyo del presidente Xi Jinping en el encuentro BRICS-Unasur respecto «a la situación con los fondos buitre en su intento por condicionar las políticas argentinas».

Domínguez, que compartió con Boudou el lugar central de la mesa ubicada en el Salón Delia Parodi, se expresó en un sentido similar y señaló que «la relación bilateral está en su mejor momento histórico», y se mostró entusiasmado con «que el ciclo que comienza sirva para profundizar y mejorar las relaciones con nuestros productores».

El titular de la Cámara Baja sostuvo además que el «ciclo que se inicia servirá para construir un desarrollo compartido en producción y comercio de granos». «Estamos ante un nuevo orden internacional con nuevos actores, donde los productores y comercializadores argentinos quieren ser sujetos protagonistas», afirmó.

«Debemos prepararnos para que nuestros recursos en materia alimentaria sean administrados por los argentinos y por los chinos sin la intermediación de las multinacionales, que se llevan la parte más importante de la riqueza que genera nuestro pueblo», remarcó Domínguez.

Xi Jinping, por su parte, coincidió con las apreciaciones y definió al momento que atraviesa la relación bilateral como «un punto de partida histórico». Además, el mandatario oriental destacó el trabajo realizado, tanto por Domínguez como por Boudou, en particular en los viajes que realizaron a China para fortalecer la relación bilateral.

De la reunión participaron también el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Senadores, Ruperto Godoy (FPV), y el de Diputados, Guillermo Carmona (FPV), además del titular del Grupo Parlamentario de Amistad con China, Omar Perotti (FPV). Estuvieron también los diputados Pablo Tonelli (PRO), Margarita Stolbizer (GEN), Hermes Binner (P. Socialista), José Ignacio de Mendiguren (FR), Julia Perié (FPV) y Luis Basterra (FPV), como así también los senadores Pablo González (FPV) y Rodolfo Urtubey (FPV), entre otros.

La presencia de la oposición deja en claro la importancia que desde todos los sectores le otorgan a la relación con China. En ese sentido, Binner señaló que «más allá de las diferencias con el gobierno, la relación con el gigante asiático es una política de Estado» que debe ser apoyada, y coincidió con lo dicho un día antes por la presidenta.

El diputado del PRO, Pablo Tonelli, se mostró conforme con la visita; «Es muy importante la relación con China. Así como es muy importante lo expresado hoy por el presidente, que sin que nadie le preguntara, manifestó la voluntad de equilibrar la balanza comercial».

En ese sentido Tonelli señaló que para lograr equilibrar esa balanza Argentina «debe buscar más allá de los commodities», aunque puede hacerlo dentro del propio sector agropecuario pero con la maquinaria.

De cara al futuro, Tonelli, que participó de la comitiva que viajó al país oriental encabezada por Domínguez el año pasado, señaló que la relación con China «no sólo debe continuar, sino que se debe fortalecer», y remarcó: «Es una relación muy importante para el país y no para un gobierno.»

Más allá de lo protocolar del acto, los representantes de ambos países no pudieron dejar de lado lo sucedido en el Mundial de Fútbol que finalizó hace apenas una semana. El primero en poner el tema sobre la mesa fue el presidente Xi, quien resaltó el desempeño del seleccionado nacional en el último Mundial al que felicitó por el segundo puesto obtenido. Xi Jinping se autodefinió como una persona a la que le gusta «mucho» ese deporte, y afirmó: «Con distintos acuerdos de cooperación también se podrá mejorar el fútbol en China con la ayuda de ustedes.»

El mandatario oriental, también lamentó que el seleccionado chino no haya participado del Mundial, pero aseguró que el fútbol en su país «está creciendo». En este caso el guante lo recogió Domínguez, que vaticinó un futuro auspicioso para China en el fútbol, y aseguró que como «lo han logrado en lo económico y en lo social también, lo lograrán en el fútbol».

El presidente de la potencia asiática ingresó al Congreso por la explanada de Avenida Entre Ríos minutos antes de las 10 para, en primer lugar, ser recibido por en el Salón de las Provincias y luego firmar el libro de visitantes en el Salón Azul.

Luego de realizar el recorrido que habitualmente llevan a cabo todos los presidentes cuando visitan el Congreso, Xi Jinping se dirigió al Salón Delia Parodi, donde se realizó la actividad central. Al término del encuentro, que se extendió por poco menos de 45 minutos, el presidente chino recibió presentes de sus anfitriones, entre ellos una camiseta de la Selección Argentina con su nombre y el número diez estampados en la espalda, que logró arrancarle la sonrisa más amplia de la mañana.

Una vez terminada la actividad institucional, Xi Jinping partió rumbo a Luján junto a Julián Domínguez, para compartir una asado de campo, que se extendió por poco más de dos horas.

Algunas críticas desde la oposición

Los acuerdos con China no fueron bien recibidos por todos, desde ya. Desde el macrismo, el massismo y la Sociedad Rural cuestionaron el acercamiento entre ambos gobiernos. «El yuan es una moneda que no tiene inserción internacional», criticó Aldo Pignanelli, ex presidente del Banco Central y dirigente –asesor de Sergio Massa– del Frente Renovador. «Lo que hizo el país asiático es dar un crédito para importar máquinas y equipos chinos», agregó en Radio Mitre. El macrista Carlos Melconian, en tanto, aseguró que «el acuerdo financiero es una absoluta fantasía, como el que firmó Redrado en 2010, donde se supone que hay un aporte de yuanes para fortificar las reservas del Central. Ahí lo único importante son los dólares.» Luis Etchevehere, presidente de la Sociedad Rural, dijo en Radio El Mundo desconocer los acuerdos. «No sabemos a qué se ha comprometido. Pero de lo que estamos seguros es que no les creemos una palabra.»

Cristina destacó la multipolaridad

La presidenta Cristina Fernández repasó en su cuenta de Twitter los encuentros internacionales de los que participó en los últimos siete días y aseguró que se trató de «una semana importante para la Argentina». «Siete días de muchísimo trabajo», fue el comienzo del primer mensaje, antes de referirse a sus encuentros con Vladimir Putin y Xi Jinping y a su participación en la cumbre de Brasilia.

«La aparición de nuevos actores va a permitir a nuestros países nuevas y mejores oportunidades, porque ya no va a ser posible un mundo donde unos dominen a otros, será el mundo de la cooperación y este deberá ser el nuevo modelo global.» Y concluyó: «Es hora de valorar esta magnífica oportunidad, que tenemos en este mundo que vuelve a ser multipolar.»

La jefa de Estado repasó las actividades internacionales de la semana que comenzó con la visita del mandatario ruso el sábado 12. «Con Vladimir Putin firmamos acuerdos en energía, comunicación, nucleares con fines pacíficos y judiciales», comenzó.

Luego se refirió a la Cumbre de BRICS más Unasur. «BRICS: Cumbre importantísima de países emergentes, reclamamos reformas en los organismos multilaterales de crédito y políticos», sintetizó.

Finalmente se refirió a la visita de Estado del presidente de China que comenzó ayer y la definió como «fundacional en las relaciones China-Argentina».

La jefa de Estado sostuvo que «esta es una nueva etapa de asociación estratégica integral. Una jerarquización de la relación entre ambas naciones.»

Ministros, optimistas por los acuerdos

M.P

El gobierno nacional vivió la visita del presidente chino, Xi Jinping, como uno de los hechos políticos más importantes del año. La cantidad de acuerdos que se firmaron, y el significativo avance en la ejecución de los proyectos alentaron el optimismo y las definiciones enfáticas. «Es un hecho histórico, de un impacto muy trascendente para el presente y el futuro», aseguró el ministro de Justicia, Julio Alak, en diálogo con Tiempo Argentino. Entre todas las medidas que se anunciaron el viernes en el Salón de las Mujeres del Bicentenario, los funcionarios destacaron sobre todo el swap (convergencia de reservas) por 11 mil millones de dólares entre el Banco Central de la República Argentina y la banca privada y estatal del país asiático. «La presidenta ha sido muy clara. El swap es muy bueno para la Argentina, para darle estabilidad a nuestra moneda», subrayó el ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, ante la consulta de este diario.

El impacto que generó la visita del mandatario chino a la Casa Rosada, donde fue tratado con todos los honores, fue otra señal de lo que en el oficialismo definen como un proceso de tránsito hacia un mundo multipolar. Anteayer, el propio Xi reconoció, traductora mediante, «los esmerados arreglos que le dispensaron» en su primer día en Buenos Aires. «Es una de las visitas que ha promovido más acuerdos de una forma integral para el desarrollo de la economía argentina. Y hoy, en un mundo multicultural, uno no puede manejarse con un liderazgo único. China ha dado una muestra clara de su decisión de ser un actor principal en la multipolaridad global», planteó Alak.

Experimentado en el trabajo conjunto con los chinos (por la compra de material rodante para los trenes), Randazzo aseguró que la relación comercial «con un gigante como China» es fundamental para la Argentina. «Tenemos una muy buena experiencia en el plazo de entrega y ejecución», señaló.