Sacan autos de las calles

La cantidad de coches abandonados en las calles de Guaymallén motivó que el municipio tomara cartas en el asunto e intensificara los operativos para trasladarlos. En los últimos 15 días, inspectores de la Dirección de Industria y Comercio procedieron al secuestro de 10 vehículos que se encontraban en estado de abandono en diferentes puntos del departamento. Los trasladan a la playa San Agustín.

Este viernes, el operativo se montó en la conocida intersección de San juan de Dios y Joaquín V. González, en Dorrego. “Allí nos presentamos por pedido de un vecino que manifestaba la voluntad de trasladar su coche, pero no tenía los medios. El propietario consiguió un sitio y el municipio aportó la grúa y el camión para retirar el coche”, explicó Rodrigo Gallardo, Director de Industria y Comercio de Guaymallén.

De acuerdo a lo que establecen las leyes de tránsito, este tipo de secuestros deben realizarse en forma conjunta con la Policía Vial. Así, los propietarios reciben multas por partida doble: la comuna labra un acta por incumplimiento de la ordenanza de higiene urbana; y la policía elabora una multa porque la presencia de coches en estado de abandono en la vía pública está tipificada como infracción.
“Es fundamental la colaboración de la Policía Vial, no sólo en términos administrativos sino operativos. Ellos ofrecieron un espacio en la playa San Agustín para el depósito de los vehículos que sean trasladados en Guaymallén”, dijo Gallardo.

Además de los casos que reportan los inspectores de Comercio, las denuncias llegan a la comuna tras los reclamos de los vecinos. Pero muchas veces son los dueños los que manifiestan la voluntad de trasladar los autos pero no cuentan con el dinero para el traslado. En ese caso, la comuna se hace cargo y los costos son cargados al padrón de vivienda.

Hasta un micro
La calle Pedernera, en San José, era conocida por un largo colectivo que llevaba años abandonado sobre la calle. Propiedad del integrante de una conocida banda de música tropical, el micro supo ganarse la antipatía de los vecinos y hasta del mismo dueño, porque propiciaba de escondite de delincuentes y acumulaba basura en su interior.
“Esta semana retiramos el micro ante la presencia de los vecinos que aplaudían a los inspectores. Y esto pasa porque este es uno de los principales reclamos ya que los coches abandonados son aprovechados por delincuentes”, señaló Gallardo.