Un árbitro muy tranquilo

Silvio Trucco fue el elegido para impartir justicia en el primer cruce entre Boca y River por Copa Sudamericana, quizás uno de los dos partidos más difíciles del año. El árbitro, de 36 años, fue claro en su mensaje: «El que tiene que ganar es el cuarteto arbitral».

Lejos de querer que el protagonismo esté puesto en los hombres vestidos de negro, Trucco afirmó que «lo más importante es que el viernes no se hable de nosotros». «Lo más importante para mi es pasar desapercibido», sintetizó.

Y para referirse al tema Merlos, se acordó de sus inicios y de los profesores que tuvo cuando arrancó su sueño de querer ser un árbitro de Primera División e internacional. «Muchos instructores nos dicen que hay que estar atentos 95 minutos; porque a veces el diablo mete la cola en el final», concluyó.