Sigue la incógnita
La defensa de Campagnoli presentó ayer un escrito ante el Tribunal de Enjuiciamiento del Ministerio Público para sostener que el proceso ya terminó y que el funcionario «debe volver a su puesto».
Los seis miembros del Tribunal tienen previsto reunirse a puertas cerradas para intentar salir del pantano en el que quedaron con la renuncia de la representante de la Defensoría Pública en el jury, María Cristina Martínez Córdoba.
Si bien la suspensión de Campagnoli dura oficialmente hasta fines de octubre, la defensa está reclamando ahora que su cliente vuelva a su puesto y amenaza con llevar la pelea a los estrados judiciales algo que, de alguna manera, haría llegar a esa fecha sin una resolución definitiva.
Campagnoli estaba a cargo de la fiscalía de Saavedra y Núñez, mientras subrogaba la Secretaría de Investigaciones Penales (SIPE) y la fiscalía 10, donde se tramitaba una denuncia por extorsión contra Federico Elaskar.
Elaskar estaba a cargo de la financiera SGI conocida como «La Rosadita» y apareció en abril de 2013 -en el programa «Periodismo para Todos»- diciendo que allegados al empresario Lázaro Báez lo habían presionado para quedarse con esa firma.