San Lorenzo con un pie en la final
Con goles de Matos, Más (2), Mercier y Buffarini, el equipo de Edgardo Bauza vapuleó 5 a 0 al de Xavier Azkargorta en el Nuevo Gasómetro por la ida de las semifinales de la Copa Libertadores.
Los de Boedo ejercieron un cómodo dominio a lo largo del primer tiempo, y se vieron favorecidos por la prematura apertura del marcador lograda por Matos, tras un exquisito pase a su cabeza proveniente de ese guante que tiene Leandro Romagnoli en el pie derecho.
Esto generá plena confianza en el conjunto local, ya que Bolívar se advertía impotente en todos los sentidos, tanto para atacar como para defender, sobre todo las pelotas aéreas.
Y prueba de ello fue que antes de la media hora ya los bolivianos estaban dos goles abajo por otro tiro libre de máxima previsión lanzado nuevamente por el «Pipi» y cabeceado en este caso por Mas, anticipándose, como en el tanto anterior, al atribulado arquero visitante Romel Quiñónez.
La distancia en el marcador aparecía así como muy cercana al ideal, y lograda en mucho menos tiempo de lo imaginado.
E inclusive se pudo aumentar en el cuarto de hora final de la etapa si Ignacio Piatti, que realizó un par de apiladas muy celebradas por los 45.000 hinchas que colmaron el Nuevo Gasómetro, hubiese priorizado la generosidad del pase atrás para Matos en vez de intentar culminar sus obras para quedar en el bronce.
El segundo período quedó abierto entonces para que los dirigidos por Edgardo Bauza manejaran los ritmos del juego con inteligencia y hasta pudieran regular pensando en la revancha del próximo miércoles en los 3.650 metros de altura del estadio Hernando Siles, de La Paz.
Una prueba de esto fue que apenas superado el cuarto de hora el «Patón» ensayó dos cambios simultáneos, sacando de la cancha a dos figuras de la noche como Matos y Romagnoli para poner en sus lugares al uruguayo Martín Cauteruccio, que está volviendo de una prolongada inactividad por rotura de ligamentos cruzados, y a Pablo Barrientos, que viene de dos meses sin jugar y concretó su retorno oficial al club llegando desde el Catania italiano.
Pero cuando parecía que estas variantes podían resultar demasiado prematuras, en cuatro minutos San Lorenzo liquidó anticipadamente no sólo el juego, sino directamente la serie, con sendas conquistas de dos jugadores no precisamente habituados a llegar a la red adversaria, como Juan Mercier y Julio Buffarini.
El «Pichi» se anticipó a un pase atrás de la defensa y definió con un derechazo abajo, que superó la mano diestra de Quiñónez, mientras que el cordobés concretó con un disparo de larga distancia que hizo estéril el vuelo del muy flojo arquero boliviano.
Una alegría para el ex Ferro Carril Oeste que apenas cinco minutos antes de esa acción vio la tercera tarjeta amarilla en el certamen y por lo tanto se perderá la revancha.
Claro que esto no representa hoy un problema para los «cuervos» soñadores, porque a tres minutos del final nuevamente Mas ganó por vía aérea tras un tiro libre del reemplazante de Romagnoli, el patagónico `Pitu` Barrientos, para redondear un 5 a 0 «finalista».
Es que si las preocupaciones que genera jugar en la altura y las dificultades que suelen ocasionar los goles de visitantes (Bolívar no anotó un tanto por primera vez en el certamen), eran temas que en la previa Bauza manejaba con el entrecejo fruncido, hoy todo eso el «azulgrana» lo dejó depositado en el arcón de las cosas perdidas. Y sigue transitando rumbo al sueño inédito.