Madre a los 53 años
Sin dudas, un premio a la perseverencia y a las ganas enormes de ser padres. Es que después de 20 años de intentarlo, en Córdoba nació Thiago, a los 53 años de su mamá y a los 52 de su papá. El bebé llegó por cesárea, con 3,300 kilos. Leticia Villalba y Jorge Castañeda habían probado desde 1993 con todo lo que la medicina puso a su alcance y sumaron rezos propios y ajenos. La pareja tiene esterilidad sin causa aparente y no se halló el motivo que les impida concebir en forma natural.
Luego de ocho tratamientos en distintas instituciones y con diferentes médicos, al fin lograron la fecundación con óvulos donados y espermatozoides del padre.
Al último tratamiento lo realizó el doctor José Pérez Alzaa, especialista en reproducción asistida y director de Fecundart, utilizando el método Icsi (inyección intracitoplasmática de un espermatozoide). “A lo largo de estos años siempre apostamos por la vida. Cada intento que no resultaba nos producía decaimiento psicológico y debíamos esperar bastante para volver a probar”, cuenta Jorge
“Muchas veces pensé por qué me toca esto, si mis hermanos tienen hijos, y yo he estado con los mejores médicos; no entendía por qué no podía tener un hijo, hasta que por fin llegó Thiago”, dice por su parte Leticia, permanentemente con su hijo en brazos.
“Lo miro y digo gracias a Dios, qué bendición”, agrega la mamá, quien confiesa que “la primera noche no pude dormir de la emoción y la pasé controlando que respirara bien. Todavía estoy muy sensible por la emoción, Jorge me dice que no llore, pero le respondo que es por alegría”.
El bebé duerme en una cuna instalada en el cuarto que acondicionó su papá, desde el piso hasta el techo. Tiene un arco iris sobre el marco de la ventana, una mini camiseta de la selección argentina con el 10 de Messi. También hay luna y estrellas que brillan en la oscuridad. Dos angelitos que representan a esos hermanos que no están. Una cartulina donde las amigas de Leticia escribieron la historia de la pareja hasta la llegada de Thiago y que le entregaron en el baby shower que organizaron el día anterior al parto.
Jorge estuvo en Chipre como soldado en misión de paz de Naciones Unidas, lo que le permitió sumar dinero para costear los tratamientos. Hoy es militar retirado, participa en toda la vida hogareña y se dedica a cuidar a Thiago. Leticia depila en su hogar, pero por ahora su clientela está avisada de que el ritmo de trabajo disminuyó porque la prioridad la tiene el niño que la llena de felicidad.