Dósis extra de vacunación
El pegadizo spot televisivo se ve hace unos días en la programación local, pero hoy fue el lanzamiento oficial: el viceministro de Salud de la Nación, Jaime Lazovski, presentó la Campaña Nacional de Vacunación contra el sarampión, la rubéola y la poliomielitis con el propósito de consolidar la eliminación de estas enfermedades en la Argentina.
Desde el 1 de septiembre al 31 de octubre, todos los vacunatorios públicos del país aplicarán, en forma gratuita, una dosis extra de la vacuna doble viral y una dosis extra de Sabin a todos los niños de 1 a 4 años, independientemente de que hayan recibido las vacunas antes.
En la presentación, el viceministro estuvo acompañado por Pier Paolo Balladelli, representante en el país de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la responsable del Programa Nacional de Control de Enfermedades Inmunoprevenibles, Carla Vizzotti, y los expertos y miembros de la Comisión Nacional de Inmunizaciones, Ángela Gentile de la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP), Silvia González Ayala y Pablo Bonvehí de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI) .
«La campaña da cuenta de la presencia de un Estado que está atento y toma todas las medidas necesarias para proteger a la población del rebrote o importación de enfermedades que ya fueron eliminadas en el territorio nacional», destacó el viceministro. «En el resto del mundo estas enfermedades no fueron erradicadas. Otros países no tuvieron este éxito», apuntó luego de advertir que estas patologías son un flagelo, en especial para los niños pequeños, y en el caso de la rubéola congénita para el bebé que está en gestación.
Lazovski agregó que «para que esta campaña sea exitosa se necesita de la participación y compromiso no sólo de las sociedades científicas y de los expertos que nos acompañan sino de todo el sistema de salud y de la población que debe concurrir para que los niños puedan ser inmunizados». El funcionario agradeció el apoyo de la OPS a la que definió como «un socio estratégico» que valida las políticas sanitarias nacionales «y al mismo tiempo nos permite compartir experiencias y conocimientos» con otros países.
Por su parte, el representante de OPS, Pier Paolo Balladelli, expresó que «Argentina vela por la salud porque es un Estado fundado en el derecho. Es muy importante el éxito de Argentina porque sirve como ejemplo y ayuda a otros países a asumir sus compromisos».
Baladelli explicó que aunque Argentina haya eliminado estas tres enfermedades todavía existen focos en otros continentes. «En un mundo globalizado los virus viajan con posibilidad de generar rebrotes. Argentina no está inmune y es por eso que el sistema de detección precoz de los casos importados y las altas coberturas de vacunación son tan importantes para que no haya transmisión».
Si bien estas enfermedades fueron eliminadas de Argentina gracias a las vacunas, aún existen países que no lo lograron, por lo cual es necesario reforzar y mantener la estrategia preventiva. Con la aplicación de la dosis extra se busca revertir la acumulación en el tiempo de personas susceptibles a contraer estas enfermedades, ya sea porque hay niños que nunca fueron vacunados o porque aquellos que fueron vacunados no tuvieron una respuesta inmune adecuada frente a la vacuna. Es por ello que para reducir al mínimo los susceptibles y evitar un brote de la enfermedad en presencia de casos importados se recurre a una dosis extra.
Por este motivo, aunque tengan el calendario de vacunación al día, todos los chicos de 1 a 4 años inclusive deben recibir de manera simultánea una dosis extra de doble viral –vacuna inyectable contra el sarampión y la rubéola–, y una dosis extra de Sabin, la vacuna de administración oral que protege contra la poliomielitis.