La sangre en la mochila de Lola no es de los indagados
La sangre que fue encontrada en el interior de la mochila de Lola Chomnalez no pertenece a ninguna de las diez personas que fueron indagadas. Así lo determinaron las pericias que realizó la Policía Científica uruguaya.
Además, se comprobó que el ADN que estaba en una toalla de la adolescente es de un hombre, cuya identidad es desconocida hasta el momento.
«Hasta ahora no hay nada», dijo ayer al mediodía la fiscal Gabriela Sierra, según informó el diario El País de Uruguay.
El martes ingresaron a la sede de la Policía Científica ocho muestras de ADN de personas que fueron indagadas. Las mismas pertenecían al pescador que encontró el cuerpo de Lola, a dos hombres radicados en el balneario Aguas Dulces y a integrantes del entorno de la joven, entre otros.
Además, el martes testificaron varios menores oriundos de Valizas. Para extraerles pruebas de ADN es necesario su consentimiento, el de sus padres y de la jueza actuante. Pero los jóvenes se negaron a que se le realicen las pericias.
Finalmente, el miércoles ingresaron otros dos patrones de ADN, con lo cual las pericias terminaron siendo diez.
Según informaron fuentes judiciales a El País, ayer a la tarde técnicos de la Policía Científica realizaron otra ronda de pericias con las muestras de los indagados y los resultados también fueron negativos.
Todas las líneas de investigación que seguía la Justicia se cayeron. Pero aún continúan con la búsqueda de «Huguito», un hombre que trabajó en Valizas el día que desapareció Lola.
Lola Chomnalez, de 15 años, desapareció el domingo 28 de diciembre a la tarde, cuando salió de la casa de su madrina, con quien había ido a pasar unos días de vacaciones en Valizas, a dar un paseo por la playa. Dos días después, el cuerpo de la adolescente fue encontrado semienterrado en una zona de médanos, y de acuerdo a los peritos forenses, murió por asfixia por sofocación, además de presentar heridas punzocortantes en distintas partes del cuerpo.