El fenómeno de la película de Hawking
«Dos años», le dijeron que sería el resto de su vida cuando a la edad de 21 los médicos confirmaron que padecía Esclerosis Lateral Amiotrófica, (ELA). En la actualidad, con 73 años continúa siendo el físico más importante de las últimas décadas, y su figura como se enaltece cada vez más configurando el fenómeno de la Hawkingmanía.
Según recordó Tiempo Argentino, el 5 de febrero se estrenó el film La teoría del todo, en el que se muestra la vida de Hawking a partir del diagnóstico y su matrimonio de 25 años junto a su primera esposa, Jane Wilde. Incluso fue el libro que ella escribió hace siete años, titulado “Hacia el infinito”, en el que se basó la película. A casi un mes de su estreno, las salas continúan llenas. ¿Qué hace que la gente se interese en su figura? ¿son sus vastos estudios del universo y descubrimientos alucinantes, o su historia de vida y convivencia con la enfermedad?
Matías Araujo y Solange Quinteros de 23 y 24 años aseguraron que eligieron ir a ver el film «por la historia de amor entre Hawking y su primera mujer». «Sabemos quién es y antes de venir averiguamos un poco sobre sus estudios, pero la razón fue porque queríamos conocer un poco más de su historia personal, aseguró Solange, en diálogo con Tiempo. Por otra parte, Germán Sousa de 25 años se autodenomina fanático de Hawking. «Estudio ingeniería y siempre me interesé en el trabajo de este genio. Por suerte la película lo mostró como yo lo imaginaba, un tipo sencillo y a la vez muy complejo.»
Otros consideran que lo que les resulta más atractivo de la figura del científico es su tenacidad, y humor con los que lleva adelante su enfermedad. Al respecto, Carina Martínez y Candela Trillos de 25 y 26 respectivamente, aseguran que «Hawking nos parece increíble por la batalla que presenta y su forma de salir adelante.»
La ELA, –conocida también como la enfermedad de la motoneurona– es degenerativa y progresiva, ataca al sistema nervioso central, y afecta la motricidad. Desde 1963, Hawking comenzó a experimentar cambios radicales: la elasticidad de sus músculos empeoró debilitándose de forma apresurada y constante, no podía caminar, ni escribir y finalmente tampoco hablar, por lo que comenzó a utilizar un sintetizador de voz para comunicarse. En principio, usó una computadora que resaltaba celdas en una cuadrícula con letras o palabras, y al seleccionarse el vocablo que quería usar, podía pulsar un interruptor. Cuando perdió la movilidad de sus manos, se pasó a un sistema de infrarrojos ubicados en sus anteojos que detectan el movimiento en los músculos de su mejilla.
Basado en su buen humor y fortaleza mental, e impulsado por el afán de continuar sus investigaciones sobre el principio del universo, el físico teórico, cosmólogo, y astrofísico británico sorteó los obstáculos que su mala salud le ofrecía, y a sus méritos científicos como uno de los más grandes físicos de los últimos tiempos, él suma 52 años de sobrevida.
Hawking siempre fue un alumno destacado, sus ideas brillantes, y para algunos alocadas, no dejaban que su presencia pasara desapercibida. Lo mismo ocurrió en su etapa como profesor. Desde 1979 y hasta jubilarse en 2009, estuvo al frente de la Cátedra Lucasiana de Matemáticas de la Universidad de Cambridge, que había pertenecido históricamente a Isaac Newton. Fue también el miembro más joven de la Royal Society, y recibió innumerables premios.
Aportes. En su tesis doctoral y junto a Roger Penrose, trabajó en el teorema de la singularidad, y pudo dar cuenta de que la teoría de la relatividad general de Einstein predice, en cierto sentido, la existencia de los agujeros negros y de un Big Bang como origen del universo, es decir, que el mismo había tenido un principio. De esta forma, contradijo a la teoría establecida que afirmaba que el universo existía en un estado estacionario. En cambio, se confirmaba su expansión, con la materia siendo creada en forma continua. Fue el único que se atrevió a teorizar sobre los –hasta entonces inexplorados– agujeros negros. Logró demostrar que dichos fenómenos emiten radiación y son cuerpos calientes. Si bien nada de lo que aseveró pudo ser demostrado aún, y por eso se afirma que aún no recibió un Nobel, «hace años que se observa el movimiento de las estrellas más cercanas al centro de la Vía Láctea y éstas describen elipses de radio pequeño en torno a un punto en el que no se ve nada. Se puede calcular la masa del cuerpo que las está atrayendo y resulta ser más de un millón de veces la del Sol. Caben pocas dudas de que se trata de un enorme agujero negro», explica José Edelstein, físico teórico argentino y amigo de Hawking (Ver recuadro).
Respecto a la popularidad adquirida, el físico argentino declara que «él nunca pasa desapercibido, cuando aparece, todo se convulsiona a su alrededor. Creo que el tema de la enfermedad con la que viene luchando desde hace tantos años genera un efecto en la gente. Si uno lo racionaliza, es inexplicable que siga vivo, pero sigue con ganas de hacer cosas, con planes y proyectos, y eso resulta un mensaje de superación casi tan magnífico como su trabajo».
«Da un mensaje de mucha esperanza a los pacientes»
«Sin dudas la figura de Hawking es extraordinaria, da un mensaje de mucha esperanza a los pacientes con Esclerosis Lateral Amiotrófica, y logra también que se visibilice la enfermedad», opinó Darío Ryba, presidente de la Asociación ELA, conformada por familiares y enfermos. Antes del estreno de la película, la asociación realizó una Avant Premiere y muchos de los miembros contaron la experiencia.
Diana Fernández es asesora pedagógica y convive con la enfermedad desde hace seis años. «Vi la peli dos veces con mis cinco hijos. Para un enfermo de ELA resulta esperanzador que alguien como Hawking pueda demostrar que los pronósticos no son determinantes, y que siempre se puede luchar». En el caso de Diana, la enfermedad fue avanzando sobre los músculos de su boca, y cuello.
Las historias se multiplican. Pilar Gralla de 37 años recibió el diagnóstico hace 17 y cree que «la filosofía de vida de Hawking es muy acertada. Hay que superar el miedo inicial y la impotencia que genera un futuro incierto, plagado de dificultades y limitaciones, pero hay que continuar sin permitir que la enfermedad adquiera un protagonismo que opaque el espíritu y las ganas de vivir.»
Dos colegas y amigos
«Hawking es uno de los mejores físicos teóricos del último medio siglo. En el campo de la gravitación probablemente sea el más importante», asegura José Edelstein, físico argentino que lo entrevistó y cultivó una amistad. Edelstein es profesor de Física teórica en la Universidad de Santiago de Compostela, España. En entrevista telefónica con Tiempo Argentino, y entre risas, afirmó que «en la comunidad científica, Hawking genera algunos celos por su fama. Por ejemplo, cuando asiste a las conferencias puede ocasionar que los fotógrafos empujen a un premio Nobel sólo para tener la oportunidad de capturar su imagen.» José y Stephen son colegas, ambos trabajan en temas cercanos, por lo que se han cruzado en varias oportunidades. En 2013, el físico argentino logró entrevistar al gran profesor para la ya discontinuada revista Orsai, y cuenta que «desde entonces, persiste un vínculo afectivo muy lindo, lo voy a visitar cada vez que viajo a Gran Bretaña y vivimos momentos emotivos».
Hasta con Homero
La popularidad de Hawking siempre trascendió a la academia y se convirtió en un personaje reconocido también en círculos no científicos. Fue así que participó de varias series y programas de televisión como Los Simpson yThe Big Bang Theory, En 1994, participó en la canción Keep Talking de Pink Floyd. En el tema se escucha su voz diciendo: «Durante miles de años la humanidad vivió de forma parecida a los animales. El ser humano tiene una facultad que sobrepasa el poder de nuestra imaginación: nosotros aprendimos a hablar». También estuvo en documentales como El universo de Stephen Hawking y su imagen fue utilizada en los dibujos Futurama.