Melina Romero: mataron al custodio de una testigo
Un policía que estaba asignado a la custodia de una testigo del caso Melina Romero fue asesinado esta madrugada de un balazo en el pecho cuando prestaba servicio frente a la casa, ubicada en la localidad bonaerense de Villa Bosch, partido de Tres de Febrero.
Fuentes policiales informaron a la agencia DyN que el oficial recibió un tiro frente a la vivienda de Melody, la testigo de identidad reservada por el crimen de la chica de 17 años, ubicada en Presidente Illia al 1200, a metros de su cruce con la calle Justo Santa María de Oro.
En tanto, una suboficial que, en ese momento iba a relevarlo, fue sorprendida por los delincuentes, llevada cautiva en un auto y minutos después fue liberada a unas 15 cuadras del lugar tras ser golpeada durante el viaje.
EL CASO
Melina Romero tenía 17 años cuando fue asesinada en septiembre de 2014. Su cuerpo fue encontrado a la vera de un arroyo en José León Suárez.
En diciembre pasado, con la liberación de Toto, un adolescente de 16 años señalado como partícipe en el crimen de la joven, la causa quedó sin detenidos. Lo decidió la Justicia de Garantías del Joven de San Martín por falta de mérito.
A principios de diciembre, Marcelo Biondi, abogado de la familia Romero, pidió al Tribunal de Casación Penal que declare nula la falta de mérito dictada en favor de los cuatro imputados en la causa.
La medida benefició al pai César Sánchez, de 45 años; a Joel Fernández, alias «Chavito», de 18; a Elías Fernández, alias «Narigón», de 20, y a un menor de 16 años, todos incriminados por M. [Melody], la «testigo clave» del caso [que hoy se quedó sin custodia policial].
La Cámara desacreditó los dichos de la adolescente, pero Biondi sostuvo en su escrito que un informe psicológico ordenado por la fiscal María Fernanda Billone determinó que la testigo no fabulabay que incluso «tiene signos de haber vivido una situación traumática, como haber visto cómo violaban y mataban a su amiga». El abogado, representante de Ana María Martínez, madre de Melina, dijo que es «la única resolución» en la justicia provincial que, «sin fundamento científico», se aparta de lo sostenido en un peritaje psicológico que concluye que la testigo «no fabula».
Biondi consideró que la resolución es «arbitraria» porque los jueces hicieron «meras especulaciones» desde un punto de vista dogmático, como por ejemplo que no se pudieron acreditar la causa ni la data de la muerte. La última novedad de la causa se produjo a fines de enero, cuando dio positivo la prueba de luminol practicada sobre un Ford Falcon en el que la chica habría sido trasladada; ahora se deberá determinar si las muestras de sangre son de la víctima o de alguno de los imputados.