Condenan a la griega por matar a su pareja
Una mujer acusada de haber matado a su pareja en 2011 y luego haber intentando cremar el cadáver para no ser descubierta fue condenada hoy a 16 años de prisión por homicidio simple, aunque permanecerá libre hasta que la sentencia quede firme.
La condena fue dictada por el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 2 de Lomas de Zamora y alcanzó a Anagiota Alexopoulos (61), conocida como «Mariana», por el crimen de su pareja Julio Caprarulo (58), cometido el 26 de noviembre de 2011 en la casa que compartían en el partido bonaerense de Avellaneda.
En su veredicto, el TOC 2 además absolvió a otros tres acusados que llegaron a juicio acusados de delitos más leves, como encubrimiento y falsedad ideológica: una amiga de la acusada, Virginia Zulberti, y los médicos Omar Rossi y José Pinto García, quienes firmaron la constatación de muerte y el certificado de defunción.
El veredicto condenatorio fue unánime y se dictó este mediodía en la sala de audiencias de la planta baja del edificio judicial situado en Presidente Juan Domingo Perón (ex Camino Negro) y Larroque, de Banfield, en el sur del conurbano bonaerense.
La defensa de Alexopoulos, llevada adelante por los abogados Patricia Anzoátegui y Julio Cisterna, adelantó que una vez que lean los fundamentos recurrirán el fallo ante la Cámara de Casación.
Es que los letrados están convencidos que su defendida no mató a su pareja, sino que Caprarulo sufrió un ataque, que no estaba muerto cuando los médicos llegaron a su casa y que el fallecimiento pudo haberse producido cuando ya estaba en el cajón o en el cementerio.
No obstante, los jueces desestimaron los planteos defensistas y condenaron a Alexopoulos a la misma pena que había requerido en su alegato la fiscal del juicio, Marcela Dimundo.
El hecho ocurrió el 26 de noviembre de 2011 en la casa que la pareja compartía en Dardo Rocha 522, de Avellaneda.
Según la acusación fiscal, «Mariana» mató a golpes a su pareja, luego realizó el velatorio en la vivienda para disimular el crimen y finalmente decidió cremar el cuerpo en el cementerio Parque Iraola de Berazategui, aunque los empleados advirtieron que presentaba lesiones que no se condecían con el certificado de defunción y llamaron a la policía.
Al realizarse la autopsia, se determinó que Caprarulo había sido asesinado a golpes en la nuca y la mujer fue detenida.