Alemania insinuó que cuestionará las fronteras europeas abiertas
Advirtió que no podrá seguir recibiendo 800.000 refugiados al año, como en 2015, e insinuó que si «otros países europeos» no comparten la responsabilidad de darles alojamiento, cuestionará la actual regulación del sistema de fronteras abiertas de la UE.
Un día después de anunciar que el país espera un récord de 800.000 refugiados en 2015, el ministro de Interior germano, Thomas de Maizière, advirtió que el creciente flujo de refugiados que llega a Alemania es insostenible a largo plazo.
«Este año debemos acogerlos y vamos a acogerlos, pero recibir 800.000 refugiados sería a la larga demasiado para un país como Alemania», dijo el político democristiano en una entrevista con la cadena ZDF que reprodujo la agencia de noticias DPA.
«Recibimos el 40 por ciento del total de refugiados que llegan a la Unión Europea (UE)», añadió el integrante de la conservadora CDU que encabeza la canciller, Angela Merkel.
«Si otros países europeos no se atienen a la ley, tendremos que tomar otras medidas que funcionen».
«El sistema de fronteras abiertas solo puede funcionar de forma conjunta con un sistema que regule su apertura de forma eficaz. Y no es el caso», concluyó el ministro.
De esta manera, Alemania puso en cuestión uno de los más preciados logros que la población europea debe al proceso de integración, el «Espacio Schengen» que abre los pasos camineros entre todos los firmantes del acuerdo de ese nombre.
De Maizière presentó el miércoles el nuevo pronóstico del gobierno alemán, que estima para 2015 la llegada de 800.000 refugiados.
La cifra duplica la estimación anterior y es la más alta registrada en la historia de Alemania. Hasta ahora el récord estaba en 1992, cuando se registraron cerca de 440.000 solicitudes de asilo.