La Asamblea General de la ONU aprobó los principios para limitar las acciones de los buitres
Avaló esta tarde por 136 votos a favor la resolución que limita el accionar de los fondos buitre a través de nueve principios que dan marco a un sistema legal global para los procesos de reestructuraciones de deuda soberanas.
La Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) aprobó hoy con 136 votos positivos, 41 abstenciones y 6 en contra, la resolución que limita el accionar de los fondos buitre a través de una serie de nueve principios que dan marco a un sistema legal global para los procesos de reestructuraciones de deuda soberana.
La resolución fue tomada por mayoría simple de votos, tras una discusión que se extendió por espacio de seis meses y que fue impulsada inicialmente por Argentina y el G77 más China.
Una vez conocido el resultado positivo expuesto en dos grandes pantallas ubicadas a los costados del estrado central de la Asamblea General, comenzaron los aplausos generalizados y los saludos de los funcionarios que se acercaron a felicitar a la delegación argentina, encabezada por el canciller Héctor Timerman y el ministro de Economía, Axel Kicillof.
También estuvieron presentes en el gran salón de la ONU, la embajadora en Estados Unidos, Cecilia Nahón; y la representante ante el organismo multilateral, María Cristina Perceval.
Momentos antes de llevarse adelante la votación que requería de una mayoría simple, el embajador de Sudáfrica, Kingsley Mamabolo, presidente actual del Grupo de los 77 más China, presentó el proyecto de resolución y felicitó a su par boliviano, Sacha Llorenti, por su “liderazgo y conducción” al frente del Comité Especial que elaboró el documento, así como a la oficina de la UNCTAD.
Los principios básicos sobre procesos de reestructuración de deuda “añaden una base y un resultado para futuros debates para esta cuestión”, afirmó Mamabolo pocos minutos antes de que los países concretaran la votación.
Los nueve principios que contiene la resolución son los de soberanía, buena fe, transparencia, imparcialidad, tratamiento equitativo, inmunidad soberana, legitimidad, sostenibilidad y reestructuración de la mayoría.