“El despilfarro también es una forma de corrupción, y el despilfarro trae corrupción”

Mauricio Macri otorgó su primera entrevista televisiva desde que es Presidente. Fue a Luis Majul, quien este domingo retornó a la pantalla con su programa “La Cornisa”.

LUIS MAJUL: ¿Qué pasó con el helicóptero?

MAURICIO MACRI – Yo nunca me enteré, iba leyendo unos informes que me habían hecho, porque hay que aprovechar cada minuto del día. Me enteré como ustedes, por las noticias. Nunca hubo un sobresalto, así que no sé si habremos estado cerca o no. Se está investigando.

-¿Pensó que podría haber estado cerca de….?

– Que se yo. Eso escapa a nosotros. Por eso hay que siempre recordar que estamos acá por un tiempo muy pequeño. Por eso hay que tratar de emplearlo en hacer cosas buenas y no complicarle la vida a los demás.

-¿Usted iba piloteando?

– No, no. Yo piloteo, sí. En la campaña empecé a practicar y a aprender, y lo hago siempre con un instructor al lado. En este caso yo iba atrás, trabajando.

-¿Su balance de los primeros 100 días?

– Siento que hemos hecho mucho trabajo. Hay que vivir como etapas que estamos recorriendo. Esta etapa es más explicitada por el ordenamiento. Lo expliqué el martes pasado. El nivel de desorden, de un Estado desmantelado, anárquico. Déficit de los más altos de la historia. Múltiples tipo de cambio, restricciones de todo tipo. Trabas. En vez de Estado sostén para que la gente pueda crecer, era un Estado que te asfixiaba. Todo eso creo lo empezamos a destrabar. Entonces, esta etapa es ordenamiento y empezar a generar espacios para la Argentina de la expansión. Y así que creo que en 90 días hemos hecho mucho. Yo en mi ansiedad, espero que mi equipo no lo vea, porque yo les digo que siempre es poco. Pero, por ejemplo, vino la canciller de la Unión Europea y ella dijo: ‘impresionante que en 90 días hayan resuelto tantas cosas’. Para el mundo es como impresionante lo que hemos hecho, y esto reafirma lo que yo les digo a todos cuando nos visitan. La Argentina es un país maravilloso gracias a la gente que tenemos. Y esta vez hemos aprendido, hemos entendido, de nuestras experiencias que tenemos que trabajar en equipo. Que hay que decir la verdad, hay que apostar al esfuerzo. A mediano y largo plazo, y no al atajo y a la viveza criolla mal entendida, que nos ha hecho mucho daño. Acá, el ejemplo tuyo de trabajar, esforzarte, luchar y batallar ha sido bastardeado por esos que en 10 minutos se han hecho ricos. La gente dice “mira Juancito que vivo”. No. Eso no es bueno porque eso al conjunto de la sociedad le ha significado un enorme perjuicio.

-¿Está gobernando para los ricos?

– Es lo que dicen desde hace diez años, cuando empecé a gobernar en la Ciudad de Buenos Aires. Y uno analiza que hicimos en la Ciudad y fue gobernar para aquellos que menos tenían. Mejorando el rol del Estado, el transporte público, la salud pública, la escuela pública, los espacios públicos. Es el mismo eje que tiene nuestro actual gobierno, y que lo va a tener hasta el último día. Porque mi prioridad es pobreza cero, derrotar al narcotráfico y unir a los argentinos. ¿A quién afecta más el narcotráfico, a los ricos? No. A los pobres, que los domina en la villa. Que destruye a sus jóvenes transformándolos en soldaditos de la lucha entre bandas. ¿A quién perjudica más un país que no crece, que no genera trabajo? ¿A los ricos? No. A aquellos que no tienen trabajo, que les hacen creer que el plan es la solución. El plan es un paliativo. La solución a la pobreza es más trabajo. Y cada medida que he tomado desde que soy Presidente, ha sido pensando en cómo vamos a generar trabajo mañana. Para esos hay que destrabar, y no cobrar impuestos que no existen en ninguna parte del mundo.

-¿La quita de retenciones a las mineras?

– Hay que mirar qué significa la minería para San Juan, para La Rioja, para Santa Cruz. Ellos no tienen soja. Su soja es la minería. Entonces, ¿por qué a algunas provincias les vamos a sacar la retención? Porque aparte les sacamos un impuesto que distorsiona el federalismo perjudicándolos. Cuando en realidad, lo que nosotros queremos es que cualquier productor, en cualquier lugar del país le vaya bien, pague impuesto a las ganancias.

– ¿Cuántos son los despidos?

– Hasta ahora van 6 mil y pico

– ¿Y el criterio cuál es?

– El criterio es que lamentablemente, en estos diez años, se ocultó -entre las tantas mentiras que hubieron- el desempleo generando trabajo estatal innecesario. Se crearon puestos que no tienen tarea. Y tampoco es justo para esas personas. Yo digo que ese millón y pico de gente que entró al Estado, en una importante proporción, hoy sabe que va a un lugar donde no tiene tareas. Y eso es muy frustrante. Porque si vos querés cumplir… Porque yo creo que la mayoría de ellos quiere cumplir, y no es que no van, no es que son ñoquis cien por cien. Pero ellos saben que van a un lugar y se sientan en un escritorio a ver que pasen las horas. Para que nadie les diga que cobran sin ir. Pero eso no es un trabajo.

– ¿El país que usted quiere a dónde va a llevar a esos que no tenían trabajo?

– A una reconversión lenta, donde tiene que haber mucha herramienta de capacitación. Para pasar de un trabajo en el sector público, que no existe, a uno que sí necesitamos. Porque, por ejemplo, un eje que es fundamental de la Argentina que viene es el Plan de Infraestructura. Que va desde la infraestructura básica, que es lograr que el cien por cien de los argentinos tengan cloacas y agua corriente. Estamos hablando de millones de personas. Esos son miles de millones de dólares de inversión en los próximos 4 y 8 años. En 8 años tenemos que terminar con ese programa. Programa que financia el Banco Muncial, el BID, la CAF. Vamos a tener recursos.

– Usted dice 8 años porque piensa quedarse?

– No, no. Porque es lo que hemos hecho. Cuatro años llega a un lugar, y al que le toque, lo que le toque por resolver.

– Por ahí le toca a usted también?

– Bueno, falta mucho. Yo voy día por día. Pero ahí es trabajo útil. Porque para eso se necesitan cientos de miles de argentinos trabajando. Lo mismo que para duplicar las autovías en 4 años. Hacer los puentes de Chaco-Corrientes, que está demandado. El de Santa Fe-Paraná.

– Usted tiene una obsesión con el tiempo…

– Es que es lo único que todos tenemos acá, en este mundo, en la misma proporción. Cada uno hace lo que quiere, o lo que puede.

– Usted pensaba que la inflación iba a ser más baja y sigue siendo altísima y es la gran preocupación de todos los argentinos.

– Sí. Y duele, duele porque yo la vengo denunciando desde 2006.

– Estamos conviviendo con altísimos índices de inflación… de hasta 4%…

– Pero va a bajar. Es un proceso, pero va a bajar. El segundo semestre va a bajar seguro. Nosotros estamos siendo cuidadosos con el gasto, austeros, bajando los enormes bolsones de corrupción que había. Y todo esto va a ayudar a que todo esto baje.

– ¿Qué tiene que ver la corrupción con la inflación?

– El despilfarro también es una forma de corrupción, y el despilfarro trae corrupción. Porque cuando hay descontrol, cuando no hay presupuesto público…. En la Argentina no hubo presupuesto público por una década. El año que viene tendremos, después de una década, presupuesto en el cual puedan ustedes, y cualquier ciudadano, controlar renglón por renglón. Es algo que se inventó con el kirchnerismo: se subcalculaba el crecimiento, al principio, 2003 – 2007, que a la Argentina le iba muy bien, el mundo crecía en forma bestial, y la Argentina decía “voy a crecer al 4”, y crecía al 9. Entonces, gastaba de forma discrecional una parte importante. Cuando empezó con la inflación, 2006- 2007, empezó a subcalcular la inflación.

– La inflación era un instrumento para mentir?

– Absolutamente. La inflación fue un instrumento que utilizó el gobierno. Claramente. A sabiendas. Lo dije en el discurso del 1 de marzo. Lo ratifico. Ellos sabían y lo que eligieron fue ocultarla. Alterando las estadísticas oficiales. Echando a los técnicos de carrera del INDEC para poder manipular los números.

– No hay responsabilidad de su gobierno con la alta inflación?

– Esto tiene que ver un cien por cien con el arrastre del 700 por ciento de inflación acumulada. Y encima, ese 700 era con un nivel de represión y de alteración de valores. Porque congelar las tarifas, a costa de que nos quedemos sin luz, eso es hacer trampa. Porque vos no podes ir al límite en el cual colapsa toda tu red de agua, de luz, de gas, de celulares, porque vos no invertís lo que tenés que invertir. Destruimos el medio ambiente, con consumos que duplican los que tienen los hermanos uruguayos.

– Eso también genera inflación…

– Es parte de la etapa de ordenamiento. Yo dije, es una etapa de ordenamiento que convive con fijar las reglas a la etapa de expansión.

-Liberaron el cepo y los empresarios y supermercados se apuraron para subir los precios.

– Eso está muy mal.

– ¿Los van a castigar?

– Ya hemos fijado multas en las cosas que encontramos excesos. Hemos transparentado un sistema de información para que el consumidor sepa donde conseguir el mejor precio. Y pusimos en marcha, en serio, no para perseguir, sino para controlar que realmente haya equidad, la Dirección de defensa de la competencia. Eso no se ha hecho nunca. Para que ninguna empresa se crea que está por arriba de la ley. La van a pasar muy mal aquellos que nosotros encontremos que tienen actitudes oligopólicas, que se cartelizan en contra del ciudadano. Eso vamos a estar atentos, vamos a investigar, vamos a estar arriba de los temas. Y vamos a trabajar juntos en algo que es muy importante. La competitividad, la productividad no es algo a favor de los ricos, es a favor de la gente. Porque una sociedad que es más competitiva genera servicios e insumos para la gente más baratos. Y genera más trabajo. Necesitamos trabajar todos obsesivamente. Volver a la tarea de cómo hacemos cada uno de nosotros mejor nuestro trabajo.

– En la tapa de La Nación de este domingo se informa de la situación irregular de Cristóbal López con la AFIP… ¿Qué tiene para decir?

– Lo que estamos haciendo. Alberto Abad me informó que estamos accionando, buscando trabar embargos sobre todo lo que se pueda para que se paguen los 8 mil millones de pesos. A todo lo que tengamos a la vista para cobrar esos 8 mil millones de pesos. Ese tipo de abusos no van a suceder más. No lo no vamos a tolerar. Acá todo el mundo tiene que respetar las mismas reglas. Acá no hay amigos y no amigos del gobierno. La ley es la misma para todos.

– Nicolás Caputo es amigo suyo y ganó tres licitaciones en una semana en la Ciudad de Buenos Aires….

– Lo importante, es que en esta nueva etapa de la Argentina, es que entendamos que ahora va a haber licitaciones transparentes, con reglas claras. Donde van a competir, y a veces van a ganar algunos, y a veces otros. Que eso no había en la Argentina. La Argentina de “los amigos se llevan todo”, no existe más. Todo va a estar en internet. Vos vas a poder controlar y verificar una licitación y que a veces gano uno que yo conozco. Pero yo conozco muchísima gente. Porque la gente sabe que yo tuve una vida antes. Y trabajé en el sector privado. En la construcción, en la industria automotriz. Y eso me llevó a lidiar, ser socio de muchos de ellos. Pero como les dije en la primer reunión de la UIA, yo los conozco, y sé quién es quién, y eso a veces es peor para ellos. Entonces yo les voy a exigir que cumplan con la ley. Que paguen sus impuestos, sus aportes previsionales, que respeten el medio ambiente. Y que compitan. Y acá va a ganar el que ganó una licitación transparente. Y esto es algo nuevo porque hace muchos años que eso en Argentina no pasa.

– ¿No van a comparar a Lázaro Baez con Nicolás Caputo?

– Cuando vean que hay miles de licitaciones y que Caputo, y otra gente que yo conozco, gane una minoría de las licitaciones, se verá… Lo que yo digo es que hay mucho prejuicio, hay mucho daño hecho de muchos años por “los amigos del poder”.

-¿Usted siente que no le tiene que pedir a sus amigos de no construir porque son sus amigos?

– Es que son argentinos. Ellos tienen la misma Constitución que usted y que yo. Tienen el mismo derecho. Yo no los puedo castigar, a que ellos se tengan que ir del país. Lo que yo tengo que velar es que las reglas sean absolutamente claras.

-¿Como está avanzando el fideicomiso ciego que manejará su fortuna?

– Hemos terminado el borrador recogiendo todas las ideas que estaban dando vueltas en el congreso y en otros lugares, y estamos esperando la respuesta de la Oficina Anticorrupción a ver si acepta el modelo. La sociedad que va a ser responsable de administrar este fideicomiso ciego.

– Me lo puede explicar?

– Todo se va a meter dentro de una sociedad, que va a administrar esto, y yo voy a recuperarlo 6 meses después que termine mi gobierno. En ese tiempo, yo no puedo interactuar con la sociedad que ejerce en el fideicomiso, no puedo tomar decisiones. Me tengo que olvidar de todo eso que sucede.

– La Diputada Carrió acusó a Daniel Angelicci de ser su interlocutor ante algunos jueces…

– Lo hable con Carrió. Yo le expliqué claramente y lo vuelvo a reiterar ahora. Daniel Angelici es Presidente del Club Atlético Boca Juniors. Por lo cual tiene una relación con los argentinos más intensa que el 99 por ciento de los dirigentes de este país. Vive de su actividad comercial, que son los bingos. Que tiene hace 25 años. Y él además tiene una larga experiencia y trayectoria dentro del radicalismo. Fue un aporte importante a la construcción y al desarrollo del PRO y hoy en Cambiemos. Con lo cual, no es un operador como lo describe lilita. Lo tiene que entender. Todo el mundo habla con jueces. Que tiene que ver hablar con jueces a describirlo y querer ponerlo en el lugar de un oscuro operador. Es el presidente de Boca Juniors. Vive de sus actividades comerciales. No es un operador de la justicia

– ¿Se siente defraudado por Sergio Massa?

– No hablo con Sergio desde hace semanas. Pero a veces, me parece, que privilegia demasiado el corto plazo y su protagonismo personal en vez de pensar en la Argentina del futuro. El tiene que pensar como tiene que pensar un hombre joven con futuro, como él tiene. En qué Argentina queremos para nuestros hijos. Hay momentos en que lo puede la ventajita del corto plazo. El deberia pensar el 100 por ciento del tiempo en cómo ayudar a la Argentina para salir de este embrollo en el cual nos dejó el kirchnerismo.

– ¿Hay mala onda con el Papa Francisco?

– De ninguna manera. Yo tengo que remitirme a la fantástica reunión que tuve. En la que recorrimos nuestra agenda de temas.

– Le faltó una sonrisa.

– Eso lo vimos, pero la tuvo cuando estuvimos con Juliana. Somos viejos conocidos. Esa reunión mía con el Papa habrá sido la undécima o duodécima reunión. Siempre ha sido de la misma manera. Nos reuníamos en Plaza de Mayo, ahora en el Vaticano. Repasamos los temas. Las inquietudes, las preocupaciones. El comparte dos cosas fundamentales. Primero, que hay que unir a los argentinos. Y él también me manifestó su preocupación también por este extremismo anti kirchnerista. Así como a uno le duele verlos tan enojados y tan agresivos a los kirchneristas que se manifestaron el 1 de marzo. También duele ver tanto enojo del otro lado. Yo también coincido con el Papa que tenemos que tratar de abandonar esos enojos y tratar de poner todo de nuestra parte para salir adelante. Y lo segundo es la lucha contra la corrupción y el narcotráfico. Me dijo “por favor Presidente no aflojemos contra la corrupción y el narcotráfico”.

-¿Cree que Milagro Sala es una presa política?

– Yo tengo que tener disciplina institucional. Este es un tema de la justicia de Jujuy. Está acusada de un montón de delitos. Entonces, yo interferir como presidente en la Justicia… Obvio que tengo mirada personal. Yo critiqué a Milagro Sala, y mucho. Porque sabía que había construido un estado paralelo y un estado paralelo no puede existir. Hay un único estado. Que ejerce las atribuciones que le corresponde. Estar donde la gente lo necesita, con la educación. Con la salud. Con la seguridad. No puede haber fuerzas paramilitares armadas distribuyendo dádivas, sometiendo gente. Eso no está bien.

– ¿Cree que Cristina Kirchner puede ir presa?

– Yo no quiero meterme donde no me corresponde. Lo que yo he dicho en el Congreso es lo que creo. La Justicia tiene que investigar. Estamos hartos de la corrupción. No importa quién. Especialmente a mis funcionarios si el día de mañana ellos creen que han hecho algo indebido. No esperar a que se vayan. Hacerlo en tiempo real. Con celeridad. Porque yo estoy igual que los argentinos. Estamos todos hartos de la corrupción. Estamos todos hartos de esta cosas de los vivos, que en un minuto y medio se salvan ellos y se olvidan de aquellos que confiaron y le dieron su voto para llegar a ese lugar. La justicia tiene un rol enorme que cumplir. Mi obligación es darle las herramientas, el acceso a toda la información, y decirles “acá no hay ningún tipo de bloqueo, de entorpecimiento”.

– Si no se arregla con Holdouts… ¿Puede haber ajuste?

– Es así. Fuera del mundo la Argentina no puede ni empezar a recorrer el camino del desarrollo. Le doy como ejemplo lo que pasó en el INVAP. El presidente de Invap me dijo, por favor cierre con los Holdouts porque no puede vender reactores. Después de que la venta del reactor a Australia fue un éxito, le quieren comprar reactores y no los puede vender ¿Por qué? Porque tiene que poner el 10% de garantia de que lo que va a hacer vaya a funcionar. En un reactor que vale 300 millones de dólares, el 10 por ciento de garantia son 30 millones de dólares. Invap no puede porque estamos fuera del mundo. Porque estamos en default. Hasta esa mínima exportación, no tan mínima, requiere que todos estemos conectados al mundo. Eso es lo que hay que entender. La infraestructura que necesitamos construir para poder crecer y generar trabajo requiere financiamiento. Hoy todo eso lo hemos perdido. El default le costó a la Argentina 2 millones de puestos de trabajo que no se generaron en este periodo. 100 mil millones de dolares en mayores costos por estar fuera del sistema.

– ¿Si no se arregla se va al ajuste o hiperinflación?

– A un ajuste. Ajuste o hiperinflación. No hay alternativa. La forma de salir gradualmente del desastre de partida que dejó el kirchnerismo es un ajuste gradual. Un crecimiento gradual reduciendo todo los desajustes que tenemos.

– Fue muy cuestionada la designación de Gustavo Arribas en la AFI… ¿Qué balance hace de su gestión en estos 100 días?

– Primero… ¿Dónde está la vara? Si recorremos a los titulares de la AFI o SIDE de Alfonsín para acá, ninguno fue un experto en el espionaje ni en temas de servicios de inteligencia. Todos eran personas de confianza del presidente de turno. La verdad que en la mayoría de los casos no hicieron una buena labor. Porque politizaron ese servicio y lo pusieron a investigar que hacía Majul en vez de prevenir atentados terroristas, o de prevenir el desembarco de más narcorafico, temas de trata de personas, etc. Arribas tiene claro que tiene que garantizar que la AFI no investigue ni persiga a ningún dirigente político, periodista… a nadie. Mi compromiso es que funcione la AFi para lo que tiene que funcionar

-¿Cuál es el objetivo del protocolo antipiquete?

-Ir recorriendo un camino de respeto por el otro. Acá nadie le pide que otros depongan sus reclamos, sus necesidades. Pero hay que sentarse en una mesa, hay que dialogar. Ahora hay un gobierno que siempre está listo. Eso es lo que más ha cambiado la realidad en estos 90 dias. El diálogo… Desde que Luis Majul pueda venir a Olivos a hacer un reportaje, a las conferencias de prensa, a dialogar con los gobernadores, a trabajar en equipo con los gobernadores. La verdad es que estoy muy contento.

-¿Usted vive en Olivos?

– Ya hace un par de semanas, porque empezaban el colegio las chicas y la quinta donde vivo los fines de semana les quedaba muy lejos. Me mudé a la casa de huéspedes hasta que terminen la casa principal.

-Usted me dijo antes de asumir que iba a hacer mucha fuerza mental y emocional para seguir siendo el mismo. ¿Lo logró?

– Hasta ahora, sí. Mantengo mis mismos hábitos, mis mismas amistades, la misma cercanía con los afectos.

– ¿Atiende el teléfono a la mismas personas?

– Absolutamente. Así es. No cambió en nada mi vida normal, excepto por tener más responsabilidades. Trabajo las mismas horas que antes, porque siempre trabajé todas las horas que me dio el físico.

– Y cuando dicen que su mujer es una especie de figura decorativa, ¿Qué le sucede?

– Me parece poco respetuoso. Mi mujer es muy importante para mi y para mi familia. Ella transmite algo lindo en términos de lo que tiene que ser el mundo del poder, demostrando que estamos acá para ayudar y no para sentirnos dueños de nada. Juliana es una persona muy sana, llega a ser mi equilibrio personal.

-¿A qué hora se levanta?

– 6.45

-¿A qué hora se acuesta?

– Depende el día. A veces a la 1, a veces a las 12. Alguna vez 11.30, pero no es habitual.

-¿Usted lleva plata en el bolsillo?

– No, ni documento ni plata. Tampoco tarjetas. Cuando fui a comprarme esos botines a San Miguel, saqué la tarjeta del cajón y fui a comprarlos.

-¿Hace cola en algún lado?

– No voy a ningún lado. Lamentablemente, si hay un costo de esto es la pérdida de tu vida propia, que es terrible. Yo extraño. Como Jefe de Gobierno circulaba y hacía cosas normales todo el día. Ahora es como que estás más rodeado. A pesar que reduje enormemente todo el aparato que heredé.

– ¿Cuánto?

– A la mitad.

– ¿El aparato de seguridad y custodia?

– Sí, me parecía una exageración.

– ¿Qué va a hacer con el avión presidencial?

– Ya hemos desarticulado lo que estaba. Era caro, obsoleto, con problemas de corrupción. Estamos buscando para comprar un avión más chico, más funcional, más austero.

-Dicen que hay pilotos que fueron desplazados que están enojados porque se estaría favoreciendo a una empresa de su padre que se llama Macair.

– No, en nada. Aparte leí en el diario que se están vendiendo a Avianca, la empresa colombiana. Un conflicto menos. Una cosa menos que contestar.

– Lo tiene que contestar. Como Dietrich y el uso del helicóptero.

– Me parece bien, pero me parecieron desubicadas las críticas. Veníamos de trabajar y dejarlo de paso a un compañero nuestro no es pasear.

– Algunos de los que critican son los mismos que no decían nada cuando Nestor y Cristina usaban el Tango 01 para llevar y traer los diarios desde Buenos Aires a Santa Cruz. Pero es pertinente la pregunta.

– Porque lo usó conmigo. No me parece que esté mal. Estábamos trabajando un sábado, porque trabajamos sábados, domingos… eso es lo que le exijo a la gente. Dedicación, honestidad, trabajo en equipo. Explicar, tener paciencia a este tipo de críticas también.

-¿Cómo encontró la quinta? ¿La está disfrutando? Porque se dijo de todo. Desde la mala energía a que una reunión con la presidenta te hace doler la cabeza.

– Me estoy acostumbrando. A mí me gustaba el departamento que teníamos con Juliana y Antonia. Era mi lugar. También me gusta mucho la quinta a la que voy desde chico. Por suerte sigo yendo los fines de semana. Por suerte me estoy acomodando a esta quinta. Y había mucho abandono, mucha dejadez. Juliana le está poniendo su mano y va a quedar maravillosamente bien.

– ¿Qué mensaje le quiere dejar a los argentinos después de estos 90 días?

– Primero gracias por el acompañamiento en estos 90 días. He sentido el afecto, sé que hay muchos que la siguen pasando mal. Que por un cambio de gobierno no les cambió la situación, que sigue habiendo alguna preocupación, acerca del futuro, del empleo. Pero a cada lugar que me he movido, todo el tiempo he recibido muestras de afecto y de apoyo y lo quiero agradecer. Entendamos que empezamos a construir ese enorme puente, que nos tiene que llevar de todas esas amarguras del pasado a ese futuro que soñamos. Y como les dije en el primer dia. Se tiene que construir en base a la verdad, a decir lo que esta pasando. Y yo me comprometí a eso y lo estoy haciendo cada dia. Por más que en muchos casos duela. Y la primera verdad es que ese cambio no se hace de un dia para otro. Los grandes cambios se hacen dando pequeños pasos todos los dias. Pero lo bueno es que ya los empezamos a dar. Ya entendimos que el puente lo hacemos juntos. Y estamos haciendo lo con los gobernadores, junto con los intendentes. Escuchándonos, porque yo no soy el dueño de la verdad. No tengo todas las respuestas. Pero espero sacarle lo mejor a cada uno para poder darles a ustedes todo lo mejor. Vamos bien. Estamos en una etapa de ordenamiento, empezando una etapa de expansión. Y la Argentina va a crecer, y vamos a generar trabajo. Y mientras tanto voy a intentar cuidar a cada uno de ustedes lo máximo posible aumentando esta red de protección social para que estemos cerca y recorramos este camino. Y que todos podamos cruzar el puente. Gracias de corazón y espero que sigamos trabajando juntos.