Pérez Corradi se negó a declarar pero reconoció su identidad
La jueza federal porteña María Romilda Servini de Cubría, firmó esta mañana el pedido de extradición para Ibar Esteban Pérez Corradi, presunto autor intelectual del triple crimen de General Rodríguez, quien se encuentra en la Fiscalía de Asunción, Paraguay, donde debe prestar declaración en el marco de la causa que lo investiga por falsificación de documentos de identidad en ese país.
Pérez Corradi llegó alrededor de las 8 a la Fiscalía de Asunción, donde presta declaración ante la fiscal Sandra Quiñones. Ayer fue capturado en la localidad brasileña de Foz de Iguazú, zona de la Triple Frontera.
El detenido fue trasladado a la Fiscalía en medio de un fuerte de seguridad, fue capturado en un operativo conjunto entre autoridades paraguayas y brasileñas. El ministro del Interior paraguayo, Francisco De Vargas, confirmó la captura del criminal fugitivo al tiempo de anunciar su traslado hasta Asunción. El alto funcionario mencionó que se optó por el transporte aéreo para llevarlo desde la zona del Alto Paraná hasta la capital, considerando que «es la forma más rápida y segura».
Prófugo desde hace cuatro años, Pérez Corradi permaneció recluido bajo vigilancia policial en la Agrupación Aerotáctica de las Fuerzas Aéreas en Asunción, donde fue enviado a su llegada a la capital paraguaya tras ser detenido en la ciudad brasileña de Foz de Iguazú, en la triple frontera entre Paraguay, Brasil y Argentina.
El narcotraficante fue puesto a disposición de la fiscal Sandra Quiñónez, quien instruye una causa en Paraguay contra dos policías por supuesta producción de documentación falsa y cohecho agravado, en la que Pérez Corradi está implicado.
Esa investigación abierta implica al narco, a quien presuntamente se entregaron una cédula de identidad y un pasaporte originales en los que figuraba la información de un ciudadano paraguayo fallecido hace más de 13 años.
Hasta ahora hay dos policías procesados por «supuesta comisión de los hechos punibles de producción de documentos no auténticos, producción inmediata de documentos de contenido falso y cohecho pasivo agravado».
Cabe recordar que el detenido está acusado de ser el autor intelectual de los asesinatos del triple crimen de Sebastián Forza, Damián Ferrón y Leopoldo Bina y ser uno de los principales proveedores de efedrina de país.
También es buscado por la justicia norteamericana, por introducir en ese país pastillas de oxicodona a través de encomienda privada, y por la paraguaya, donde está acusado de falsificación de documentos.
De Vargas también señaló que Pérez Corradi se había borrado las huellas digitales para evitar ser identificado. «Aparentemente tendría las huellas digitales borradas, esto está sujeto a confirmación», explicó a la prensa el funcionario paraguayo, quien contó que dialogó telefónicamente sobre la captura del empresario argentino con la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich.
En declaraciones al canal C5N, su abogado Carlos Broitman, aseguró que el detenido «no es el autor del triple crimen». Y consideró que su cliente es «un blanco», y que su vida corre peligro.
«Acá intervino inteligencia de la Agencia Federal de Investigación (AFI), fue la que colaboró para la entrega de información a Paraguay y a Brasil», sostuvo el abogado. Y agregó que no está «sorprendido», por considerarla «inminente».
Broitman detalló que Pérez Corradi fue encontrado «en un departamento de Foz Iguazú». «Él cae porque cometió descuidos en su seguridad con el teléfono», sostuvo el letrado, y añadió que el hijo del exprófugo «tiene una enfermedad, y por eso se dijo ‘hasta acá llegué'».
«Me llamó su mujer y me dijo que fue detenido en presencia de sus dos hijos. La nena se asustó y se metió debajo de la cama. Lo detuvieron en un departamento en Foz de Iguazú y decidieron llevarlo a Asunción. Esto es producto de información que manejaba la AFI. Vamos a pedirle a la justicia paraguaya que venga a la Argentina. La pena en el triple crimen sumada a la de lavado de dinero es una pena mucho mayor de la que se lo estaba solicitando en Estados Unidos», agregó.
• Causa en Paraguay
Pérez Corradi está imputado en Paraguay en una causa por falsificación de documentos de identidad de ese país y en la que el 9 de junio pasado se había ordenado su detención.
La captura fue requerida por la fiscal paraguaya Sandra Quiñónez, quien en su momento aclaró que a pesar de esa orden de detención prevalecen las causas penales que el sospechoso tiene en la Argentina y por las que figuraba en la lista de los más buscados por Interpol.
Según la investigación que se lleva adelante en Paraguay, Pérez Corradi está acusado de haber pagado 200.000 dólares a cambio de un documento falso y un pasaporte a nombre de Walter Miguel Ortega Molinas, un joven muerto en 2002 en un accidente, para poder permanecer prófugo.
Luego de descubrirse el hecho, toda la cúpula de esa dependencia policial paraguaya fue descabezada y se dispuso la detención de dos suboficiales de la fuerza.
De acuerdo a la acusación de la fiscal Quiñonez, el documento falso fue impreso el 4 de agosto de 2015, casi tres años después de que en la Argentina el fiscal de Delitos Complejos de Mercedes, Juan Ignacio Bidone, pidiera la captura internacional de Pérez Corradi por el triple crimen de General Rodríguez.
En esa causa, el ahora detenido es considerado el autor intelectual de los homicidios de Sebastián Forza (34), Damián Ferrón (37) y Leopoldo Bina (35), cometidos en 2008 en dicha localidad de la provincia de Buenos Aires.
En febrero último, tras la fuga y recaptura de Martín Lanatta (44), su hermano Cristian (42) y Víctor Schillaci (35) -condenados como coautores de los asesinatos- los abogados de Pérez Corradi anunciaron que se iba a entregar e incluso hubo versiones acerca de su detención en Paraguay, pero esto nunca se concretó hasta esta mañana en Brasil.
Además de esta causa, en octubre de 2008, Pérez Corradi fue detenido en el barrio porteño de Palermo por pedido de la Agencia Antidrogas de los Estados Unidos (DEA), que lo acusó de haber enviado a ese país unas 1.500 pastillas de oxicodona.
En tanto, en diciembre de 2010, el entonces juez federal Norberto Oyarbide lo procesó por lavado de dinero en la causa por la «mafia de los medicamentos».