River ganó el superclásico y dejó el campeonato al rojo vivo
River Plate se quedó con un triunfo inolvidable ante el líder Boca Juniors por 3 a 1, se apropió de un Superclásico vibrante, por la 24ª fecha del Campeonato de Primera División, y dejó el certamen al rojo vivo.
Los goles de River fueron convertidos por Gonzalo Martínez, Lucas Alario y Sebastián Driussi, mientras que Fernando Gago descontó para Boca.
Con esta victoria, River llegó a los 45 puntos y con un partido menos (a jugar con Atlético Tucumán de visitante en junio) está a cuatro de Boca, líder del certamen, con 49 unidades.
El Superclásico no defraudó a nadie, fue emotivo, vibrante, cambiante, con llegadas en ambas áreas y momentos clave para determinar un ganador, como la doble tapada del arquero de River Augusto Batallaa dos minutos del final, cuando Driussi aún no había liquidado el partido.
River fue mejor en la primera etapa y a pesar de la temprana lesión de Milton Casco, supo explotar el sector izquierdo del ataque con el ingreso de Camilo Mayada y las gambetas del «Pity» Martínez.
El equipo dirigido por Marcelo Gallardo aprovechó al máximo los espacios que le dio Boca, cuya defensa fue endeble, con varios de los problemas que exhibió en lo que va del campeonato. Para colmo el «Xeneize» perdió a Ricardo Centurión por lesión y con ello el desequilibrio de mitad de cancha hacia adelante.
En cada contra del «Millonario» se percibía la posibilidad de gol, y a pesar de que generó varias, solo pudo convertir en dos ocasiones. El primero con un remate seco y sin dejar picar en el campo del «Pity», tras centro de Driussi, y el segundo con otro contraataque, la asistencia de Martínez a Alario y una definición del ex Colón que no encontró una resistencia floja en Agustín Rossi.
El partido estaba controlado por River, que ganaba las pelotas divididas, mientras en el mediocampo encontraba seguridad bajo la batuta de Leonardo Ponzio y el auxilio de Ariel Rojas, pero Boca descontó en el tercer minuto adicionado con el tiro libre de Gago, cuyo objetivo era un centro que terminó en gol ante una mala salida de Batalla.
El segundo tiempo, con ese gol de Boca, quedó abierto. River tuvo destellos de lo que hizo en la primera parte y Boca generó ocasiones muy importantes como la salvada en la línea de Lucas Martínez Quarta(17m) y el cabezazo de Darío Benedetto por encima del travesaño.
River pudo haber liquidado antes el partido con la definición del ingresado Carlos Auzqui, que pasó a centímetros del palo derecho de Rossi y luego Batalla se redimió del error en el tiro libre de Gago.
El conjunto de Núñez, quien ganó por primera vez en La Bombonera como entrenador en su partido 150, justo 100 menos de los que celebraba Guillermo Barros Schelotto, dio por finalizada una noche para no olvidar con el tanto de Driussi, en otra contra con la defensa que tomó a la defensa de Boca muy mal parada.
River se retiró de La Bombonera con el pecho inflado, el día que se cumplieron dos años del ataque al plantel por el gas pimienta en Copa Libertadores, con un golpe certero al eterno rival que le permite anotarse como candidato serio a pelear el torneo al cual le dio vida y lo dejó al rojo vivo con varios equipos que ya hacen cuentas.
El próximo rival de River será Gimnasia La Plata, como visitante, y Boca, que en la reanudación del campeonato sólo derrotó a Defensa y Justicia y Arsenal en su cancha, jugará otra vez como local ante Newell’s Old Boys.