Cristina Kirchner cruzó a Macri por sus dichos sobre la deuda y lo acusó de fomentar la fuga de dólares
Casi en el hall de su casa. De local, Cristina Fernández de Kirchner, presentó su libro «Sinceramente» en el microestadio de la ciudad santacruceña de El Calafate. “La situación del país es grave: vamos a afrontar momentos difíciles”, vaticinó la candidata a vicepresidenta, pero a la vez se mostró optimista sobre el futuro, ponderó a Alberto Fernández, recordó una y otra vez a Néstor Kirchner y aseguró: “No se le puede seguir pidiendo a los que menos tienen”.
La actual senadora, volvió a definir la importancia de un frente como el que se conformó para enfrentar al macrismo: “Ahora, con la unidad del peronismo, todos los que creían que había destinos individuales, deben entender que no las hay en el proyecto nacional, popular, democrático. Se requiere una profunda unidad de sectores que sin estar de acuerdo en todo, sí acuerden en el destino central del país”.
Resaltó la figura de Alberto Fernández, como cuando se refirió a sus intervenciones en el debate presidencial. Justamente, en un momento de su charla, CFK, respecto del acto de Santa Fe, con la presencia de todos los candidatos a la primera magistratura, exclamó que “en cualquier país normal, luego de las cosas que se dijeron anoche (por el domingo), se producía un escándalo”, y luego de una pausa, resaltó: “Pero en los medios mencionan el dedo de Alberto… Me preocupa, porque los medios de comunicación deben cumplen un rol importante, y así no están cumpliendo”.
El microestadio donde se realizó la presentación fue inaugurado el pasado 23 de agosto, tiene una estructura de 2.500 metros cuadrados y capacidad para 5.500 personas, incluyendo el campo de juego. Está a pocas cuadras de uno de sus domicilios declarados, en el cruce de las calles Padre de Agostini y Los Tehuelches. Un lugar al que la candidata del Frente de Todos siempre se refirió como su «lugar en el mundo».
Cristina, en varios momentos de su charla, se refirió a Néstor Kirchner. En uno de ellos, resaltó: ”Él no paraba. No hay otra forma, te podés equivocar pero dejás todo. Es la forma de transformar”. Y luego enfatizó: “Una de las cosas impresionante que hizo Néstor es reubicar a la política. La política era una mala palabra. Veníamos del que se vayan todos, Veníamos de muchos fracasos”.
Entre otras frases que deslizó Cristina, también avanzó con que “hay que generar trabajo y para eso, generar actividad económica”, y que “no se le pueden seguir pidiendo cosas a los que menos tienen”. También que “lo más patético es acusar a nuestro gobierno de planero… Justamente hoy este gobierno tiene el doble de planes que el 9 de diciembre de 2015 cuando dejamos el gobierno”. Resumió: “La gente quiere trabajo y eso es lo que hay que hacer”
Advirtió que “los peores momentos de endeudamiento de la Argentina coincidieron con los momentos de mayor figa de capitales”. Cuando le referenciaron la avalancha de críticas que soporta el actual gobierno y el presidente en particular, enfatizó: “No, no… Están salvando el ideario neoliberal y por eso le están pegando al gobierno”. Luego, reaccionó ante un silbido contra el presidente actual y exclamó: “No hace falta, ya votamos. Esa es la forma”.
Aseguró que “Así como está, la Argentina no va más”. Retomó lo que dijo en La Matanza: “No se puede que viene uno y desendeuda y viene el otro y endeuda”. Recordó que en la dictadura se estatizó la deuda privada y que entre ella estaba la de la familia Macri”. Claro que luego puntualizó: “Va a ser necesario, y corresponde políticamente: los argentinos tienen derecho a saber por qué nos endeudaron y quiénes se llevaron la plata”. Y redondeó: “Claro que digo que la deuda se pague, pero que más la pague los que la disfrutaron, los que se la llevaron”.
Casi en el cierre del acto, CFK enfatizó: “Yo no soy una optimista contumaz como era Néstor”, pero admitió que “si todos los argentinos ponen lo que tienen que poner volveremos a hacerlo”. Poco antes había señalado que “ante tanto pesimismo y ante tanta mishiadura, recuerdo que durante 12 años y medio, pronosticaban que se venía años malos, que se terminaba todo, que se acababa el viento de cola… y seguimos adelante. Pero después vino esto…”