Agüero no juega más
Seguro que no soñó con quedar fuera del Mundial Sergio Agüero. Pero esta madrugada se conoció la peor noticia. Está desgarrado y no podrá jugar ya en esta Copa. Quizás se imaginó rompiendo redes, como cada vez que luce la camiseta del Manchester City. Dedicándole cada uno de esos gritos a Benjamín, su hijo, el motor de su fútbol. Y aunque Alejandro Sabella lo respaldó durante toda esta primera ronda, nunca estuvo a la altura el Kun . Jaqueado por su discusión con el clan Maradona, que tomó estado público, ayer sufrió una lesión que lo marginó. Se confirmó que “el problema muscular”, tal cual definió el técnico en la rueda de prensa, es un desgarro grado 1. Bajo esta coyuntura, Ezequiel Lavezzi y Rodrigo Palacio piden pista en San Pablo.
Agüero no había tenido una sola situación frente al arco de Vincent Enyeama cuando, a la media hora de juego, sintió un pinchazo en la cara posterior del muslo izquierdo. Enseguida pidió el cambio. Y aunque Pachorra mandó a hacer el calentamiento precompetitivo a Palacio y a Lavezzi, se inclinó por el atacante del PSG francés. Salió en camilla el Kun . Y el testimonio del dolor se observó en la zona mixta, cuando se retiró renqueando, con un vendaje que se asomaba debajo de su short. Lo acompañaba Alberto Pernas, uno de los empleados administrativos de la AFA. No se detuvo a hablar con los periodistas el delantero. Su cara reflejaba un gran malestar .
A pesar de haber ganado la Premier League, junto a Pablo Zabaleta y Martín Demichelis, no fue un buen año para Agüero. El fantasma de las lesiones se apropió de su cuerpo. El 29 enero, durante un partido ante Tottenham, se desgarró en la pierna derecha. Le sucedió dos semanas después de haber vuelto a jugar. Hasta ese momento, había sido clave para el equipo del Ingeniero Pellegrini, con 15 goles en la temporada. Volvió en marzo. Y se resintió ante Barcelona, por los octavos de final de la Champions League. De nuevo, trabajó para recuperar su mejor condición física. Sin embargo, el 13 de abril, contra Liverpool, no pudo llegar al minuto noventa por una molestia en la ingle. El 3 de mayo, después de marcar ante Everton, recrudeció el dolor en la zona. Por eso Sabella no lo arriesgó en los amistosos de despedida, frente a Trinidad y Tobago y Eslovenia. Prefirió tenerlo a punto para el debut mundialista ante Bosnia. No rindió Agüero como tampoco brilló contra Irán y por eso el técnico decidió reemplazarlo cuando restaba un cuarto de hora para el final. Ahora, el cambio será obligado. Lavezzi, que entró en sintonía y hasta ejecutó el córner que derivó en el gol de Marcos Rojo, y Palacio tendrán que pelear mano a mano por un lugar.
“Tenemos delanteros del mismo estilo de Agüero y otros, con un estilo distinto, como Lavezzi, que entró y se manejó bien por las puntas y nos ayudó a cubrir los espacios”, afirmó Sabella. Y Messi, su amigo, había dicho: “Si tiene algo, ojalá que no sea grave y que vuelva a jugar con nosotros”. Pero el deseo del 10 ya no será posible.