Barovero antes del clásico
Tal como sucede cada semestre, el Superclásico es uno de los partidos más esperados por propios y extraños. Por la magnitud y expectativa que genera -incluso a nivel mundial-, a muchos protagonistas les resulta bastante difícil enfocarse en los duelos previos cuando restan pocos días para el tan ansiado ‘derby’ entre River y Boca.
Pero ese no aparenta ser el caso de Marcelo Barovero, quien no dudó en destacar la mayor importancia que tiene el próximo adversario del ‘Millonario’, Lanús (lo visitará el domingo desde las 21.30), por sobre el ‘Xeneize’: «Más allá que con Boca es un partido aparte, sabemos que esto es por puntos y lo importante es que el final nos encuentre ahí arriba».
«Todas las miradas están el próximo partido por lo que genera. Pero antes nos toca un rival que está atrás nuestro, nos persigue y viene en levantada. Es importante tratar de conseguir la victoria. También trataremos de ganarle a Boca porque sabemos lo que significa, pero ahora tenemos algo importante que es enfrentar al que está atrás nuestro», destacó el arquero del conjunto de Núñez en conferencia de prensa.
Y continuó elogiando al inminente rival: «Lanús es un equipo que propone jugar, va a ser un partido abierto y lindo para ver. Respetamos que tienen muy claro una idea y buscan ser protagonistas en los torneos que juegan. Va a ser un partido con muchas situaciones, hay que estar muy atentos porque los primeros minutos van a ser importante».
«Mientras sigamos sumando creo que siempre la ilusión se va a acrecentar. Nos encontramos arriba y con una buena diferencia de puntos. Hay que tratar de ir sumando todos los partidos, sabiendo que ahora enfrentamos al que está atrás nuestro y que tiene una buena chance de acortar. Trataremos de aumentar o mantener la diferencia con Lanús», avisó el ex Vélez.
Y concluyó dejando un relevante mensaje: «Tuvimos un arranque por encima de la media, pero tenemos que superar el desafío de continuar lo que estamos haciendo. Debemos prepararnos cada partido al cien por ciento porque cada encuentro es una historia nueva. No es fácil mantener la cabeza en todos los partidos. Por ejemplo fue un partido muy bueno y bastante esperado el del domingo pasado, eso nos llevó a distendernos un poco y no meternos de lleno en el siguiente encuentro».