Central aguantó hasta el final, pero Boca se impuso en los penales
Los canallas empataron 0 a 0 con los xeneizes, pero los de la Ribera tuvieron mejor puntería desde los doce pasos y se quedaron con la Supercopa argentina. Los de Alfaro dominaron claramente en el segundo tiempo, pegaron tres tiros en los palos, erraron un mano a mano pero no pudieron anotar. Digna presentación centralista
Rosario Central cayó ante Boca Juniors por penales luego de igualar 0 a 0 la final de la Supercopa argentina. En el estadio Malvinas Argentinas de Mendoza, el conjunto de Gustavo Alfaro se quedó así con el certamen que enfrentó a los ganadores 2018 de Superliga y Copa Argentina.
El elenco boquense fue muy superior durante todo el partido, sobre todo en el segundo tiempo, etapa en la que acumularon cinco situaciones claras de gol contra ninguna de los auriazules. El palo salvó a Central en tres oportunidades, Nández erró un mano a mano y Benedetto le sacó astillas al palo con un cabezazo.
Los canallas, que venían atravesando un duro momento deportivo con escasez de resultados y un mal rendimiento deportivo, lograron llevar al subcampeón de América hasta la instancia de los penales, corriendo mucho, jugando poco y con la suerte de su lado.
Ahora, a Central le tocará cerrar su paso por el grupo H de la Copa Libertadores (de la que ya está eliminado)el miércoles que viene ante Libertad de Paraguay y luego comenzará su receso, tras el que deberá hacer una buena campaña para quedarse en primera. Boca se sacó la espina de las últimas cuatro finales perdidas.
El trámite
El primer tiempo fue parejo, con una leve supremacía de Boca aunque con un Central bien parado y punzante en algunas aproximaciones, sobre todo cuando Lovera tomó las riendas del ataque.
Los de Alfaro llevaron peligro en los primeros minutos: a los 2’, un centro desde la derecha de Zárate encontró a Mas, que conectó de cabeza afuera; y a los 5’, el propio Zárate remató al arco a la salida de un córner, pero salvó Barbieri.
Para los auriazules, la más clara fue a los 19’, cuando el arquero Andrada le tapó un gran disparo desde afuera del área a Rodrigo Villagra.
Los centralistas intentaron neutralizar el circuito de juego de los de Alfaro y salir rápidamente de contra, pero sólo cumplieron con la primera parte. De todos modos, los de la Ribera tampoco pudieron imponer su jerarquía y se fueron al descanso con una mueca de disgusto por el primer acto que cerraron.
En el segundo tiempo, fue un monólogo de Boca, que tuvo cinco situaciones nítidas de gol: el mano a mano de Nández por arriba (26’), dos tiros en el palo en la misma jugada (38’), un cabezazo de Benedetto que pasó cerca (41’) y otro balón estrellado en el travesaño tras un rechazo hacia atrás de Rinaudo.
Rosario Central cerró filas, corrió cada pelota como si fuera la última y puso enjundiapara tratar de disimular la diferencia a favor de su adversario. Lo logró hasta los penales, pero allí Boca no falló. Rinaudo falló el suyo y le dejó el título servido a Izquierdoz. Alegría y desahogo para un justo vencedor.
Los penales
Central: Ortigoza (gol), Gil (gol), Parot (gol), Zampedri (gol), Caruzzo (gol), Rinaudo (atajó Andrada)
Boca: Benedetto (gol), Tevez (gol), Pavón (gol), Villa (gol), Buffarini (gol), Izquierdoz (gol)