¿Cómo llegan Francia y Croacia para la súper final?

Francia y Croacia jugarán una final «inesperada» este domingo, a partir de las 12 horas, en Moscú, no por sus presentes futbolísticos sino por su historia.

Equipos parecidos en muchos aspectos pero bien diferentes en otros jugarán, los balcánicos, por su primer Copa del Mundo y los galos por repetir la gesta de 1998 cuando levantaron el trofeo en su casa.

El equipo dirigido por Didier Deschamps cuenta con dos figuras excluyentes: el cerebro y experimentado Antoine Griezmann y la juventud y picardía de Kylian Mbappé. Ambos son los líderes goleadores del seleccionado galo con tres conquistas cada uno. Con un fútbol rápido y vertical, Francia basa su fortaleza en el gran presente de N´Golo Kanté en la mitad de cancha y la solidez defensiva de Raphael Varane en la zaga central. Si a eso se le agrega que cada vez que lo llamaron a intervenir el arquero Hugo Lloris estuvo a la altura, se puede explicar claramente la poca cantidad de goles recibidos (cuatro) y la buena cosecha en el arco de enfrente (diez), que lo ubican en el quinto lugar entre los más goleadores.

En ese aspecto, Croacia es superior, y con sus 12 tantos a favor ocupa el segundo puesto detrás de Bélgica, el que más festejó con 14 gritos. Más compacto en su formación, los dirigidos por Zlatko Dalic tienen a tres futbolistas con dos conquistas en los seis partidos disputados (aunque muchos de ellos jugaron tan sólo cinco porque el último duelo de la fase de grupos, ante Islandia, jugaron los suplentes ya que se encontraban clasificados y con el primer puesto asegurado): Mario Mandzukic, Ivan Perisic y Luka Modric.

Croacia también es un equipo que va de área a área (es el segundo con más disparos al arco del torneo). Intenta atacar rápidamente por los costados y todas las acciones pasan por su cerebro Luka Modric, el jugador que más corrió hasta ahora en la Copa del Mundo: 63 kilómetros. Pero también cuenta con la mejor defensa hasta el momento, que rechazó y frenó ataques rivales en 272 oportunidades.

Entre los disparos al arco se destacan Perisic con 20 en el conjunto balcánico y Griezmann, con 19 en el galo. La paridad en el arco también es casi idéntica, pero Danijel Subasic fue más determinante por haber estado presente en dos definiciones por penales en las cuales contuvo tres ante Dinamarca y uno frente a Rusia.

En el plano más general, los croatas dominan en varias estadísticas. Fueron, hasta el momento, el equipo más golpeado, claro que con 60 minutos más de juego que Francia, que lo sigue en esa tabla.

Croacia es el segundo equipo más goleador y eso se debe, en gran parte, a ser también el segundo que más lo intentó con 91 disparos, cuatro menos que Brasil. En faltas cometidas también marcha en la segunda posición con 89 infracciones, tres menos que Rusia. Además fue el tercer equipo que más córner a favor tuvo (mucho corresponde a su juego por las bandas) y es el que más tarjetas amarillas recibió: 14.

La estadística a tener más en cuenta en la previa de la final es la de minutos jugados. Croacia, con tres tiempos suplementarios, llegará mucho más desgastado que Francia, que resolvió todos sus partidos en los 90 minutos.