Crece la tensión
La agrupación racista dice que el policía «hizo su trabajo contra ese negro criminal», en referencia al fusilamiento del joven afroestadounidense Michael Brown. También dicen que quieren proteger «las empresas de los blancos».
La localidad estadounidense de Ferguson, en el estado de Missouri, sigue convulsionada por las masivas movilizaciones en reclamo por el asesinato del joven afroestadounidense Michael Brown, a manos de un policía blanco local. Ayer otro ciudadano negro murió a manos de la policía y la jornada culminó con 78 personas arrestadas y la confiscación de armas de fuego y bombas Molotov. En medio de este clima, la organización racista Ku Klux Klan anunció que recauda fondos para el autor del crimen, el agente policial Darren Wilson.
Las movilizaciones en Ferguson por el asesinato del joven Brown no cesan, a pesar del despliegue de la Guardia Nacional dispuesto por el gobernador de Missouri, Jay Nixon, que no logró apaciguar la tensión en la novena jornada de reclamos. Es por eso que centenares de personas volvieron a ocupar la Avenida West Florissant, epicentro de las protestas, en una concentración que comenzó en forma pacífica y culminó con fuertes enfrentamientos, detenidos, algunos heridos y el uso de gases lacrimógenos y bombas de humo para dispersar la protesta, según informaron los medios locales.