Del Potro ya tiene rival para su regreso
Mientras cuenta las horas para que llegue el momento, Juan Martín del Potro ya sabe quién será su primer rival en el camino de regreso al circuito. Se trata del estadounidense Denis Kudla, número 53 del mundo, en la primera ronda del ATP 250 de Delray Beach, que arrancará el lunes en el estado de la Florida.
Delpo jamás ha enfrentado a Kudla, un diestro con revés a dos manos que no tiene títulos ATP y este año lleva dos victorias y dos derrotas. Pero independientemente del jugador que estará del otro lado de la red, el principal rival del tandilense será su ansiedad, sus nervios y todo lo que le genere saltar a una cancha por los puntos después de once meses.
Muy lejano parece aquel partido del 23 de marzo ante el canadiense Vasek Popisil, en la primera ronda del Masters 1000 de Miami, también en la Florida. Después de aquella derrota, en apenas el segundo torneo que jugaría en todo 2015, el ex número 4 del mundo volvería a sufrir con su muñeca izquierda, y el 10 de junio ingresaría por segunda vez al quirófano.
Con un arduo trabajo de recuperación, pero sobre todo con enorme paciencia y motorizado por sus ganas de volver, Delpo se puso a punto y concretará su retorno la semana próxima. Recibió una invitación especial para jugar en el cemento de Delray Beach, un torneo donde el máximo favorito será el sudafricano Kevin Anderson.
Delray Beach no es un torneo más en la carrera del ganador del US Open 2009. También allí concretó un regreso al circuito, en 2011, después de su primera operación en la muñeca (mayo de 2010). Y lo hizo con un gran triunfo en sets corridos ante el serbio Jankko Tipsarevic.
En las jornadas previas al certamen, Delpo entrenó con el colombiano Alejandro Falla y disfrutó por TV de la final del Superbowl. Este sábado, con el sorteo del cuadro principal. agregó un dato más a su preparación: el nombre del rival.
Delpo sabe que primero deberá prestar atención a su muñeca, recuperar en competencia la sensibilidad en el revés a dos manos, el golpe en el que la utiliza. A los 27 años, el ganador de 18 títulos sabe que esta puede ser la última chance de recuperarse. Y todo el mundo del tenis aguarda que lo haga.