El Gobierno confirmó que se activó un swap de monedas con China por 130 mil millones de yuanes
El Banco Central confirmó este domingo que se activó el acuerdo de swap de monedas vigente con el Banco de la República Popular China (PBC) por 130 mil millones de yuanes renminbi como refuerzo de las reservas internacionales. A través de un comunicado, el BCRA destacó que se consolidó el pacto durante un encuentro entre los presidentes de ambas entidades, Miguel Pesce, y Yi Yang en el marco de la Reunión Bimensual de Gobernadores de Bancos Centrales que organiza el Banco de Internacional de Pagos (BIS) en la ciudad de Basilea, Suiza.
«Se ha activado el acuerdo de swap de monedas vigente entre ambas instituciones y se comprometieron a profundizar el uso del RMB en el mercado argentino para el intercambio bilateral», destacaron. El swap en cuestión representa «el intercambio de monedas como refuerzo de reservas internacionales por 130 mil millones de yuanes renminbi y una activación especial por 35 mil millones de yuanes renminbi para compensar operaciones del mercado cambiario», según puntualizaron.
En noviembre del año pasado, Alberto Fernández y el presidente de China, Xi Jinping, anunciaron la ampliación de la disponibilidad libre del swap en cinco mil millones de dólares, la cifra exacta que pretendía Argentina. «El presidente Xi me explicó que era una excepción absoluta que hace China para con Argentina y así lo tomamos y lo agradecemos», comentó Fernández al término del encuentro. «Lo que representa el swap, o la ampliación del uso del swap para la Argentina, es contar con cinco mil millones de dólares más las reservas a la hora de disponer la acción del Banco Central para el fortalecimiento de nuestra moneda», añadió el ministro de Economía, Sergio Massa.
«Se planteó la necesidad de ampliar el volumen y el uso del swap, la decisión del gobierno chino fue ampliar en cinco mil millones de dólares que vienen a reforzar las reservas y nos dan la posibilidad de disponer de más herramientas para garantizar las exportaciones de las pequeñas y medianas empresas que a veces tienen temor de no poder acceder a los dólares», detalló luego Massa, quien en la previa había adelantado que una medida por el estilo o la emisión de un bono argentino en yuanes eran las dos alternativas que había a mano para equilibrar una relación bilateral desigual.
QUÉ ES EL SWAP
El swap es un intercambio de divisas entre dos países; en la práctica, actúa como una suerte de préstamo contingente. Este acuerdo entre los bancos centrales le permite a nuestro país contabilizar entre sus reservas unos 130.000 millones de yuanes (cerca de U$S 20.000 millones), que engrosan las reservas brutas. Funcionarios de Gobierno consignaron a través de la agencia Bloomberg que podrían sumarse otros 20.000 millones de yuanes.
Si el Gobierno quisiese utilizar parte de ese dinero para pagar deuda, podría hacerlo, pero con la autorización china y pagando una tasa elevada. En principio, la principal ventaja sería que si hay un acuerdo por los pagos de 2022, extendiendo el swap se cubriría el 100% de lo que queda con el FMI. Mientras no se active, no tiene costo, pero queda contabilizado dentro de las reservas internacionales y está disponible para ser utilizado inmediatamente ante una crisis cambiaria. Cuando este se utiliza, el swap está pactado de acuerdo a la tasa interbancaria de Shanghai, la Shibor, que actualmente roza el 6% anual.
CÓMO NACIÓ EL SWAP
La historia se remonta al 15 de abril del 2009, bajo la gestión de Cristina. En esa fecha, ambos bancos centrales se comprometieron a llevar adelante un swap de monedas por un monto de 70.000 millones de yuanes (38.000 millones de pesos), cifra equivalente a U$S 10.200 millones. El período efectivo del acuerdo se fijó en tres años, con posibilidad de renovación.
Posteriormente llegó el Swap en julio de 2014, firmado entre los presidentes de las autoridades monetarias de cada país, por un monto equivalente a U$S 11.000 millones. En esa fecha, las reservas internacionales ascendían a 29.519 millones de dólares. Cuando en 2015 se agotaron esos fondos, el entonces presidente del BCRA, Alejandro Vanoli, pidió un respaldo de U$S 2000 millones frente a un inminente pago del bono Boden 15. Luego llegó el gobierno de Mauricio Macri, que en julio de 2018 anunció la renovación del convenio bilateral por tres años más, por un monto equivalente a 11.000 millones de dólares. Ya con el Frente de Todos en el poder, Argentina y China renovaron el acuerdo en agosto de 2020, nuevamente, por tres años.