El Gobierno nacional analiza nuevas medidas para desalentar la salida de argentinos al exterior

El jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y la ministra de Salud, Carla Vizzotti, analizaron propuestas para la «implementación de medidas adicionales de control» y anuncios para desalentar la salida de argentinos y residentes hacia países con nuevas olas y cepas de Covid-19″, informaron fuentes oficiales.

Entre las medidas analizadas, se encuentra la de «implementar decisiones como las de Canadá, donde cada pasajero tiene la obligación de pagarse sus test de PCR y su alojamiento de confinación de modo obligatorio».

Las fuentes agregaron que «hay preocupación por los argentinos que, aún ante el contexto regional de aumentos de casos y la aparición de nuevas cepas, todavía analizan viajar al exterior»
.

Los funcionarios analizaron este mediodía modelos tomados por otros países para evitar el ingreso de personas con coronavirus.

Más temprano, en una rueda de prensa, Vizzotti había declarado que » sin lugar a dudas» hay que «desalentar los viajes» y que la gente tiene que saber que ir a un lugar con casos (de coronavirus), con una variante nueva, es un riesgo individual y sanitario para el país».

«Entre las medidas analizadas, gana terreno implementar decisiones como las de Canadá, donde cada pasajero tiene la obligación de pagarse sus test de PCR y su alojamiento de confinación de modo obligatorio», informaron las fuentes.

En ese país, además, se evalúa la salud del viajero que arriba «antes de que salga del puerto de entrada» y las personas deben «aislarse durante 14 días aún si no tienen síntomas».

Políticas implementadas en otros países
Canadá tiene también prohibido los viajes por razones discrecionales (no esenciales), como el turismo, la recreación o el entretenimiento, y aquellos que lleguen sin una razón esencial son rechazados en la frontera.

Además, mencionaron una de las políticas adoptadas por España, donde «los viajeros procedentes de países de riesgo deben acreditar disponer un PCR con resultado negativo, realizado en las 72 dos horas previas a la llegada» a ese país.

También consideraron las medidas del Reino Unido, donde para ingresar o regresar (excepto desde Irlanda) los viajeros deben «proporcionar su detalles de contacto y de viaje además de presentar una prueba Covid-19 negativa antes de viajar» y luego entrar en cuarentena, en un hotel destinado especialmente «si el ingreso a Inglaterra o Escocia se realiza desde un país con prohibición de viaje».

Otras medidas
En el encuentro con la prensa realizado en el ministerio de Salud, Vizzotti había adelantado el análisis de las medidas para «desalentar» los viajes.

«No hay ni una medida ni un área responsable de decir: no va a entrar el virus. Entonces hay que desalentar la situación. Luego, hay que fortalecer todas las medidas que están vigentes. El test de ingreso, la mayoría, la declaración jurada, y hacer la cuarentena, cumplirla», declaró.

Otras medidas analizadas por el Comité de Gestión de Pandemia es bajar la frecuencia de vuelos y fortalecer los controles de ingreso.

«Está en el DNU la indicación de hacer la cuarentena al regreso, de hacer el aislamiento para que si alguien empieza con síntomas se minimice la transmisión; es una estrategia más», amplió.

«Lo que trabajamos en el Consejo Federal de Salud, en el Comité de Gestión de la Pandemia y trabajaremos esta semana es cómo fortalecer el cumplimiento y el control, tanto con los Gobiernos provinciales como con Seguridad de Nación», indicó la ministra.

Vizzotti sostuvo que «esto hay que transmitirlo a la población, sobre todo cuando uno está hablando de viajes que no son esenciales, laborales o por situación de salud, si hablamos de vacaciones».

«Tenemos que poner en la mesa la situación que hay a nivel mundial y regional y el tema de las variantes. Es importante para la salud emocional tomar un descanso, pero la verdad es que hay algo que nos excede en el mundo», expresó.

En la rueda de prensa, la ministra la ministra fue consultada por la idea de cerrar las fronteras con Brasil, propuesta que circuló y fue generando adhesiones.

«Lo ideal es que entren menos personas con posibilidad de tener las variantes» de coronavirus, sostuvo Vizzotti, pero reseñó que en la pandemia de 2009 se suspendieron los vuelos de México y entraron por otros lugares», por lo que indicó que «son situaciones que necesitan otras estrategias» y consideró «muy importante que la población perciba ese riesgo y desestime viajar»
.

En un texto difundido se solicita a la autoridades «imponer el cierre de nuestras fronteras, en particular para personas provenientes de Brasil y el control estricto tanto de las fronteras con el resto de los países vecinos como de los vuelos internacionales» para evitar o demorar la circulación comunitaria de la variante P1 del virus en el país.

El pedido incluye «el cumplimiento de un confinamiento obligatorio por un lapso de 14 días para todos aquellos que reingresen al país, en hoteles o centros previamente asignados a esta tarea».

Estas medidas «deberían ser independientes de los estudios diagnósticos que los viajeros acrediten, atendiendo a que los mismos son incapaces de descartar la existencia de un proceso infeccioso incipiente».

El texto lleva la firma de numerosos investigadores, entre los que se encuentran Andrea Gamarnik, Alberto Kornblihtt, Jorge Geffner, Jorge Aliaga, Adrián Paenza, Daniel Feierstein, Soledad Retamar, Jorge Aliaga, Rodrigo Quiroga y dirigentes de derechos humanos como Nora Cortiñas y Adolfo Pérez Esquivel.