«Error humano» en la caída de la avioneta
El accidente, en el que murieron cinco personas y cuatro resultaron heridas, ocurrió el 27 de mayo en aguas del Río de la Plata, a pocos kilómetros de Carmelo, departamento uruguayo de Colonia.
«Cuando el avión cayó al agua los motores estaban encendidos, entró con potencia, no hubo una falla técnica», aseguró al diario uruguayo El País una fuente vinculada a la Comisión Investigadora de Accidentes e Incidentes de Aviación de ese país, tras darse a conocer el informe final del siniestro.
El técnico consultado precisó que «un avión puede accidentarse por causas técnicas, que están descartadas, por la situación ambiental, que no incidió, o un error humano. Volar es una interacción entre hombre y máquina, si la máquina anduvo bien, falló el hombre», resumió.
Según el informe, la aeronave no cayó sino que el piloto la controló hasta que impactó contra el agua, y dejó en claro que, si bien algunos pasajeros no llevaban puesto el cinturón de seguridad, esto no influyó directamente en la muerte de los cinco pasajeros, ya que uno de ellos sí lo llevaba.
El piloto Leandro Larriera, perteneciente a una familia de pilotos, trabajaba desde hacía 14 años para el empresario Federico Bonomi y en temporada alta viajaba a Carmelo una o dos veces por día.
En el accidente perdieron la vida Larriera, los ejecutivos de Renault Argentina, Gustavo Fosco y Fernando Sánchez; el gerente de TTS Viajes, Fernando Lonigro; y el relacionista público Facundo Alecha.