Facundo Arana practica para escalar una vez más el Aconcagua
Tiene una materia pendiente y toda la fuerza para volver a intentarlo. Facundo Arana, que en el 2012 intentó infructuosamente llegar a la cumbre del Everest (8.848m) llevando la bandera de la donación voluntaria de sangre, retomará ese desafío y eligió venir al cerro Aconcagua (6.962m) para realizar la aclimatación.
Sin intervalos y sin descanso, el actor, que terminó su último unipersonal En el aire el 28 de febrero pasado en Buenos Aires, al día siguiente ya estaba en Mendoza eligiendo el equipo que utilizaría para regresar al Coloso de América.
Ni el equipamiento, ni la complejidad del ascenso al Aconcagua le son ajenos. El 2 de noviembre del 2010, fuera de temporada y con temperaturas que promediaban los 20°C bajo cero después de los 5.000 metros de altura, Facundo llegó a la cumbre y cumplió su objetivo de colocar allí una bandera para conmemorar el 96º aniversario de la primera transfusión de sangre.
En aquella expedición, el bonaerense fue acompañado del fotógrafo Pablo Betancourt, que filmó todo el viaje para un documental que se emitió por el canal Encuentro. El equipo se completó con el guía Ulises Corvalán y Herman Kineeteman, quien lo asistirá también en esta expedición, junto con Tomás Ceppi y el apoyo logístico de la empresa Grajales.
«Vine otra vez a Aconcagua para entrenar y sobre todo probarme. Quiero volver a intentar el Everest, para mí es una cuenta pendiente», señaló Facundo al portal aconcaguaonline.net
El pasado miércoles todo el equipo llegó al campamento de Plaza de Mulas (4.200m) para comenzar a subir, siempre que el clima se lo permita.
Según trascendió antes de viajar a Mendoza, el actor ya había comenzado su entrenamiento en Buenos Aires con una novedosa máscara que tiene la función de quitarle el oxígeno mientras entrena, como para que su cuerpo se adapte a las situaciones en las que podrá encontrarse durante la ascensión al Everest. Para este entrenamiento contó con la guía de una kinesióloga mendocina.
Al Everest ascenderá con Tendy Sherpa, un guía nepalés que conoció en su viaje anterior al Himalaya.