Guerra en Ucrania: cuáles son los escenarios posibles a futuro, en la opinión de expertos
Mediante bombardeos a instalaciones militares y el despliegue de tropas es sitios estratégicos de Ucrania, el presidente ruso, Vladimir Putin, dio comienzo a una nueva fase de la guerra que desde 2014 azota a uno de los países más pobres de Europa. En las últimas horas, Rusia tomó el control de Chernobyl y se prepara para hacer lo propio con la capital, Kiev. Decenas de miles de personas comenzaron la evacuación y se espera una oleada de refugiados en países limítrofes.
En la mañana de Moscú y mediante un discurso grabado, el histórico mandatario ruso anunció una “operación especial militar” sobre Ucrania bajo pretexto de “proteger a las personas” que habitan en las República Popular de Donetsk y República Popular de Lugansk. “Las circunstancias requieren una acción decisiva de Rusia”, dijo y advirtió a quienes interfieran que “pagarán las consecuencias”.
Poco tiempo después comenzaron los bombardeos en las ciudades de Mariúpol, Kharkiv, Odesa y Kiev que rápidamente se extendieron a gran parte del territorio ucraniano y al momento dejaron más de 70 instalaciones militares destruidas y cerca de 100 personas muertas, en su mayoría militares.
Si bien el mandatario apuntó que «los planes de Rusia no incluyen la ocupación de Ucrania», el despliegue de tropas que incluyó la toma de la radioactiva ciudad de Chernobyl y la toma del aeropuerto cercano a Kiev podría suponer otra cosa.
En paralelo, esta tarde, en un discurso desde la Casa Blanca, el presidente de EEUU, Joe Biden, anunció una nueva batería de sanciones contra bancos y empresas estatales rusas para limitar la capacidad del país para hacer negocios en las principales divisas del mundo. Las mismas se aplicarán contra los dos mayores bancos rusos (Sberbank y VTB) y limitarán la capacidad del país para hacer negocios en dólares, euros, libras y yenes.
Las medidas se suman a un paquete de sanciones de la Unión Europea, entre las que se encuentran el bloqueo a la compra de bonos del gobierno ruso y una prohibición de ingreso de bienes provenientes de los dos territorios separatistas.
Por el momento, no hubo respuesta directa de las principales potencias en materia de sanciones contra el jefe de estado ruso, Putin. En diálogo con Ámbito, el analista internacional y profesor de Geopolítica, Eduardo Martínez, dio sus motivos al respecto.
“En cualquier escalada vinculada a la política internacional siempre hay un margen para subir un escalón más. Cuando hicieron las primeras sanciones económicas, que incluyeron a políticos de la Duma o Congreso ruso y algunos emporios económicos de Rusia, también habían dejado afuera a Putin y llamó la atención, pero en realidad tiene que ver con la posibilidad de tener otro elemento más para redoblar la apuesta”, explicó.
Actualmente, tanto la OTAN como la principales potencias que la integran cuentan con margen para seguir presionando a Rusia. Del otro lado, la decisión de avanzar abruptamente sobre la totalidad del territorio ucraniano limitó su margen de maniobra, considera Martínez. “La OTAN y EEUU aún tienen ese margen para aumentar sanciones, mientras que del lado de Rusia ya no lo tienen porque saltaron 15 escalones a la vez y la única forma de moverse es hacia atrás”, algo que para el experto es “poco probable”.
Durante el discurso de esta tarde, el presidente estadounidense anunció el envío de tropas hacia Alemania, descartando la posibilidad de incorporarse directamente en el conflicto. “EEUU jamás va a mandar tropas que puedan enfrentarse a Rusia. Nunca lo va a hacer, no lo hizo en 45 años de guerra fría y no lo va a hacer por Ucrania”, consideró Martínez y remarcó que actualmente no hay ningún compromiso de ningún país de la OTAN de enviar tropas.
Para el experto en Geopolítica, EEUU, junto con Canadá, Republica Checa y Letonia, entre otros, se está limitando a venderle armas a Ucrania y aplicarle sanciones a Rusia, pero descartó que pueda haber “de ninguna manera un envío de tropas de OTAN para defender a Ucrania”. De todas maneras, adelantó que una de las opciones será mostrar “mucho movimiento de tropas, dentro de las fronteras de los países de la OTAN para resguardar las fronteras”.
Sobre la posición de Ucrania en el conflicto, no dudó en afirmar que “en este momento Ucrania está sola, es decir, no tiene más que las armas que le vendieron y su propia gente. No va a haber ejército extranjero apoyando a Ucrania”.
Al ser consultado sobre si EEUU y la OTAN empujaron a Ucrania a un enfrentamiento con Rusia a sabiendas de la diferencia de poder entre un país y otro, Martínez remarcó que en la previa del conflicto “EEUU echó leña al fuego todo el tiempo, situación que a Francia y Alemania les enojaba porque ellos apostaron a la vía diplomática, justamente porque también podían ser víctimas de un problema a futuro del gas de Rusia”.
Más allá de la posición de la OTAN, el experto consideró que Putin, hasta hace unas semanas, se encontraba “en una posición cómoda, porque tenía un pie en las negociaciones y un pie en los separatistas prorrusos”. Pero la situación cambió totalmente al momento de reconocer las repúblicas y decidir invadir Ucrania: “Redobló tanto la apuesta que no dejó otro margen que recibir sanciones y no tener nada más para canjear. Dentro de la tragedia donde las grandes potencias han incentivado el fuego, tanto Rusia como EEUU, de una manera desmesurada, hay que sumarle la soledad absoluta en la que hoy se encuentra Ucrania, en donde lo único que recibe son cartas de apoyo, sanciones económicas a su enemigo pero ellos ni una tropa”.
Si semanas atrás la comunidad internacional descreía de la posibilidad de una guerra, el escenario actual hace dudar sobre cualquier posible hipótesis a futuro. Lo que ocurra de acá en más es incierto, pero se presentan distintas opciones. Una de ellas es la toma de la capital, Kiev, y la salida del presidente Volodimir Zelenski.
“Si me preguntaban eso hace 48 horas hubiera dicho que no, pero hoy Kiev está precitamente cercada. La posibilidad de Rusia de tomar Kiev en un día la tiene, claramente. Creo que va a frenar en un escalón anterior para poder negociar”, dijo Martínez, para quien es lo único que le queda a Putin.
Refugiados
En apenas un día, cientos de miles de personas abandonaron las principales ciudades de Ucrania para refugiarse en las afueras e incluso salir del país. Para Martínez “es impensable el número de refugiados” que puede generar el conflicto si continúa escalando. Incluso, explicó que de los territorios reconocidos independientes por Rusia ya han cruzado la frontera un sinfín de ciudadanos.
Sin embargo, las posibilidades para aquellos que se encuentran en el oeste son aún menores. “Por su posición geográfica, a los ucranianos no les quedan muchos lugares donde escapar: de un lado lo tiene a Bielorrusia (aliado de Rusia), la misma Rusia, del otro lado a Crimea (anexada por Rusia), sumado al Mar Negro. No tienen muchas posibilidades de salida”.
Una de las opciones que el analista observa como posible, aunque aún no concreta, para permitir la asistencia de ciudadanos y permitir la salida de aquellos que deseen abandonar el país tiene que ver con la intermediación de organismos internacionales. “La opción sería que haya una apertura de organismos internacionales que puedan ingresar, como el ACNUR”, dijo.
El ingreso de organismos “solo puede darse mediante el alto el fuego”, explicó, algo que de acuerdo a los acontecimientos recientes “no creo que ocurra”. “El único que lo puede generar es Rusia y no lo está haciendo, a no ser que llegue al borde de Kiev y decida hacerlo ahí para negociar con las autoridades la no agresión futura a estas repúblicas que reconoce, a cambio de retirarse. Si no hace eso, es directamente la toma del status quo, tirar a (Volodimir) Zelenski, y tratar de generar un gobierno prorruso como era hasta 2014, cosa que sería una locura absoluta”, concluyó.