Habló la mujer acusada de estafar a Susana
Hace unos días, la Justicia de Uruguay procesó con prisión domiciliaria a una mujer que se habría quedado con dinero de los empleados de Susana Giménez.
La maniobra era llevada adelante por una mujer que era intermediaria entre la administración que maneja los asuntos de Giménez en el país vecino y los empleados de la diva; según los abogados de Giménez se habría quedado con unos 100.000 dólares.
La mujer procesada, que cumple prisión domiciliaria en Punta del Este, habló con Perfil sobre las acusaciones que pesan en su contra.
«No soy estafadora, no tengo antecedentes y mi familia son mis hijos; mis padres fallecieron y soy hija única», aseguró Carolina Arabaolasa, de 36 años.
«Yo me dedicaba más que nada al personal de sus casas. Por ahí me llamaban cuarenta veces por día por problemas domésticos. Entonces yo intermediaba y le explicaba a Susana que había cosas que en Uruguay hay que pagar, que no te regalan nada», aclaró.
Explicó que Susana mandaba un cheque mensual al estudio para los gastos administrativos y pago de sueldos, y que unas pocas veces depositaba dinero directamente en su cuenta.
«Indudablemente hay impuestos sin pagar y me echan la culpa a mí. Y yo no tengo nada que ver. En Montevideo hay 38 contadores que se dedicaban a eso», asegura la mujer, que afirma ser la «chica de los mandados», que hacía lo que pedían sus jefes.
Al ser consultada sobre el porqué del faltante de unos 100.000 dólares, respondió: «No sé. Yo no me robé nada, me pueden dar vuelta que no tengo nada».
La Justicia seguirá investigando el tema, más allá del procesamiento inicial. Uno de los abogados de la mujer dijo que «aún se está investigando si tiene o no responsabilidad en este tema.
Además, puede haber otras personas implicadas. Ella no tiene antecedentes; sí tiene una causa cerrada por extinción del delito previo a la condena. Ahora se está averiguando que pasa con la actual denuncia».