La luna de miel por el G20 duró poco, el dólar volvió a subir y se disparó el Riesgo País
A pesar del festejo de Macri por la buena organización de la Cumbre, la desconfianza en la marcha de la economía argentina crece día a día.
Al gobierno de Mauricio Macri le duró muy poco la luna de miel que le reportó la Cumbre del G-20 celebrada hace apenas una semana en la ciudad de Buenos Aires.
Siete días después de finalizado el encuentro de los líderes de las 20 mayores economías del mundo el dólar volvió a dispararse (en la semana subió 70 centavos cerró a 38,37 pesos y llegó a cotizar 38,71 el jueves) mientras que el Riesgo País, el índice que más preocupa a los analistas económicos y financieros, subió casi 30 puntos.
¿Qué significa que suba el Riesgo País? Sencillamente que la marcha de la economía argentina no genera confianza en el mundo por lo que el Estado, para poder captar el interés de los inversores extranjeros debería estar dispuesto a pagar más por sus colocaciones de deuda sino nadie optará por sus bonos soberanos. A mayor riesgo mayor tasa de interés.
Hace apenas un año el riesgo país de la Argentina estaba en los 350 puntos básicos, hoy supera los 730 puntos.
Otra demostración de la poca confianza en la economía del gobierno de Macri lo constituye la disparada de los seguros contra default. El gobierno de la Alianza Cambiemos se aseguró con el préstamos del FMI el pago de los vencimientos de 2019. Nadie puede explicar sin embargo cómo hará frente el país a los vencimientos de 2020. Esta sí una pesada herencia que dejará Macri al próximo gobierno, incluso si le toca a él mismo gobernar hasta 2023.
Los seguros de default para deuda soberana argentina de 5 años cotizan en torno de los 650 puntos. Casi el triple del nivel de hace apenas un año.
Argentina terminará 2018 además con un ratio deuda/PBI cercano al 90%, 30 puntos por encima del ratio normal y más del doble del ratio con el que Macri recibió el gobierno en diciembre de 2015, pero además con una alta proporción de la deuda nominada en moneda extranjera.
A este escenario se suma la profundización de la recesión a la que apostó el gobierno de Macri como medio para frenar en seco la inflación. Estrategia que puede dar resultados relativamente rápidos en ese frente pero que afecta duramente la actividad económica y la creación de empleo. Si no crece la economía la carga fiscal por intereses será cada vez más alta generando un círculo vicioso difícil de salir.