Massa presentó el proyecto para restringir importaciones por 120 días
El líder del Frente Renovador, Sergio Massa, presentó en la Cámara de Diputados su proyecto para declarar la «emergencia aduanera» y suspender por 120 días la importación de determinados bienes finales de consumo que afecten la «sustentabilidad» de pymes nacionales, de forma tal de ponerlas al resguardo de «prácticas desleales» de mercado.
El ministro de Producción, Francisco Cabrera, le salió al cruce y lo tildó de «irresponsable» al entender que tal medida podría hacer caer acuerdos comerciales de la Argentina con sus socios por varios miles de millones de dólares.
Sin embargo, en los fundamentos del proyecto, el tigrense explica que «lejos de vulnerar la normativa internacional vigente en el marco de la Organización Mundial del Comercio y otros acuerdos», la iniciativa «busca asegurar que en la práctica dichas normas se cumplan efectivamente y no sean violadas en la práctica a través de acciones engañosas, distorsivas y/o anticompetitivas que atenten contra los productos argentinos».
La propuesta de Massa, prorrogable por 120 días adicionales, propone el retorno de las declaraciones juradas previas de importación para áreas sensibles, y aclara que la normativa sólo aplicaría a bienes finales de consumo y que «no deberá afectar a aquellos bienes intermedios que resulten indispensables para la cadena productiva nacional, así como tampoco a productos medicinales, equipamientos médicos y otros bienes esenciales que no sean producidos en el país».
«Con el objetivo de garantizar que la producción de las pymes nacionales no se vea perjudicada por prácticas desleales, resulta urgente que por un plazo de 120 (ciento veinte) días, prorrogable, se utilicen inteligentemente las herramientas hoy existentes para administrar el comercio internacional que otorga el marco de la OMC, que son las Licencias No Automáticas», define el diputado en el texto que acompaña el articulado.
También destaca que la normativa, que modifica algunos artículos del Código Aduanero, tiene como objetivo «combatir el flagelo del contrabando y las prácticas mafiosas que, además de perjudicar gravemente las cuentas públicas, ponen en riesgo la estabilidad y el desarrollo de las empresas locales y, en consecuencia, al trabajo de los argentinos».
El proyecto instruye al Poder Ejecutivo, mediante el Ministerio de Producción, a crear un «Registro de Posiciones Sensibles de Importación» a fin de determinar aquellos productos importados que están poniendo en riesgo la producción local.
A su vez, en otro de los artículos, se exhorta al Gobierno a «identificar los sectores más afectados y a diseñar planes de sustentabilidad y fortalecimiento de los mismos», teniendo en cuenta que el sector pyme en la Argentina representa «la mitad de las ventas, casi 70% del empleo y más del 98% de las unidades económicas formales».
«La Historia Argentina del último lustro ha dado sobradas muestras del impacto en la actividad y el empleo de la apertura indiscriminada de las importaciones. En este sentido, es menester contar con la mayor cantidad de herramientas posibles que permitan un estricto monitoreo de aquellos rubros cuyo crecimiento exponencial derivaría en los impactos mencionados», concluye Massa en los fundamentos del proyecto de ley.
Tras acusar recibo de la presentación del proyecto por parte del líder opositor, Cabrera salió con los tapones de punta a criticarlo: «Massa no está siendo responsable, no tiene idea lo que significa poner en riesgo la seguridad jurídica de quienes le compran y le venden a la Argentina», señaló visiblemente molesto con la iniciativa del Frente Renovador.
En línea con el presidente Mauricio Macri, el funcionario dijo que el proyecto de Massa es sólo «oportunismo político» que podría «hacer caer los acuerdos comerciales» con países como Chile, que representa 2.800 millones de dólares al año.
En declaraciones a radio Continental, aseguró que le llama la atención que el proyecto esté impulsado por Massa, al cual consideró como un «líder político sumamente importante y escuchado» por la opinión pública y sus pares en el Congreso.
El ministro advirtió además que, de ser aprobado el proyecto, la Argentina perdería la «credibilidad comercial» de todos los países que son socios comerciales y se impondrán «medidas repaliativas» que frenarán las exportaciones locales.
«Esos mecanismos nos sacan del sistema legal internacional porque están en contra de las normas de la Organización Mundial del Comercio (OMC)», dijo.
Pese al cruce que mantuvieron Massa y Cabrera, el líder del Frente Renovador se reunió en la noche del martes con el presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, quien señaló según fuentes parlamentarias que en el oficialismo hay «tranquilidad» respecto del futuro de la cooperación de la bancada massista para la aprobación de leyes.