Nepal: las maravillas que el terremoto sepultó
Por lo menos cuatro de los siete sitios clasificados como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el valle de Katmandú -tres de ellos antiguas plazas- quedaron severamente dañados.
El editor del Times nepalí, Kunda Dixit, aseguró que «culturalmente hablando, las pérdidas son incalculables». Tras la catástrofe, sin embargo, se intentará reconstruir los monumentos.
En Bhaktapur, hasta ahora la ciudad antigua mejor conservada de Nepal, la mitad de todas las casas quedaron destruidas y el 80% de los templos dañados.
También sufrieron daños la torre de Dharahara, que una vez dominó el horizonte de la capital, Katmandú, y que ahora quedó reducida a una pila de tristes escombros.
El sitio fue construido por el primer ministro de Nepal en 1832 y era muy popular entre los turistas que querían ascender los más de 200 escalones hasta la plataforma panorámica.
La plaza de Durbar de Katmandú, en la ciudad antigua de la capital, uno de los patrimonios de la Unesco, también quedó severamente dañada. Es un complejo de palacios, patios y templos que la Unesco llama «el punto focal social, religioso y urbano» de Katmandú.
El terremoto dejó hasta el momento más de 5 mil víctimas fatales y no se descarta que la cifra siga aumentando.