#NiUnaMenos se hizo presente en varios centros de votación
El colectivo en contra de la violencia de género y los femicidios desplegó una campaña en la jornada de ayer con ayuda de las autoridades de mesa. Los números de asistencia para las víctimas lucieron en las escuelas bajo la consigna: «Votar es nuestro derecho. Vivir sin violencia, también.»
Fernando acaba de votar. Baja las escaleras en la entrada del Colegio Carlos Pellegrini mientras desenrolla el cable de sus auriculares. No ve el cartel enorme que está sobre su cabeza en el que una mano muestra los cinco dedos diciendo “basta”, acompañada por una frase ya dicha muchas veces: #NiUnaMenos. Va rápido, pero se detiene para hablar con Tiempo Argentino.
No sabía que el colectivo Ni una menos desplegó una campaña para que las autoridades de mesa impriman y peguen en los lugares de votación un cartel con los teléfonos para denuncias. “Me parece excelente que se haga esto porque ayuda a concientizar. Pero sobre todo, para no aflojar. El Ni una menos tiene que quedar. Yo como varón me hago cargo, y si la problemática está hay que seguir dando batalla porque después, cuando las cosas pasan, ya es tarde”, expresó el joven a este diario luego de emitir su voto.
Detrás de él baja Josefina. “La gente tiene que estar informada porque de esa manera tiene más herramientas para actuar ante situaciones de violencia de género”, considera la chica.
#YoVotoNiUnaMenos fue la campaña que se viralizó en las redes sociales para que los números telefónicos de asistencia y asesoramiento en casos de violencia de género estén al alcance de todos y todas. Y como las elecciones presidenciales implican un alto nivel de movilización en todo el país, el día de la votación constituyó una gran oportunidad para brindar esa información.
El cartel con la información se podía bajar e imprimir desde la página del colectivo (www.niunamenos.com.ar) y se convocaba a las autoridades de mesa y fiscales a pegar en los lugares de votación un cartel que decía: “Votar es nuestro derecho. Vivir sin violencia, también”, y recordaba los números de teléfono de los servicios.
“Esto lo hacemos porque corresponde, porque es un deber”, dice a este diario María Soledad Azorai, presidenta de una de las mesas en el Pellegrini. Y luego agrega: “Está muy buena la campaña porque mientras las personas hacen la cola y esperan para votar pueden leer y quizás, entre ellas haya alguna mujer golpeada o un familiar de una víctima que se anima a denunciar.”
A unas cuadras, en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires (UBA), Emiliano se posicionó a favor de la causa y consideró que “fue una estrategia acertada” que se difundieran los números útiles en un día de tanta movilización popular.
Gorras, famosos, una novia, una abuela, un engaño y algo de escatología en la jornada electoral
Dos fiscales del Partido Obrero fueron detenidos en una comisaría de Río Grande (Tierra del Fuego) luego de que se negaran a obedecer la orden impartida por un gendarme de quitarse las gorras que llevaban antes de ingresar al cuarto oscuro. Los jóvenes Octavio Lautaro Pérez y Francisco Cansino, que debían realizar el control de las boletas de su partido, denunciaron haber sido golpeados. El incidente ocurrió en la escuela secundaria Ernesto Guevara.
En vísperas de la jornada electoral, el diputado salteño Alfredo Olmedo, del Frente Renovador, fue protagonista de un escándalo cuando fue interceptado y filmado por su esposa, Eliana Piorno, cuando salía del motel Las Palmeras, de la capital provincial, en compañía de otra mujer. Un video difundido ayer muestra la discusión entre ambos, y el momento en que Piorno, que estaba con la hija de ambos, le quita las llaves del auto. Olmedo se marchó en taxi.
Nuevo video, nuevo escándalo. La vedette Vicky Xipolitakis se filmó en el cuarto oscuro de una escuela de Lanús y lo difundió en todas las redes sociales, anticipando su voto: agarró con sus dedos, una a una, las tres boletas de los principales candidatos y dijo: “Me gusta Scioli. Me gusta Macri. Me gusta Massa. No sé a quién votar… Los tres, voy a votar a los tres. Soy muy generosa”. Al salir, agregó: “Sentí felicidad al votar. Soy muy patriota y me encanta participar de la fiesta democrática.”
Un votante orinó las boletas de todos los candidatos a presidente y a gobernador bonaerense en una escuela de Villa Adelina. El sujeto ingresó en la mesa 550 de la escuela EPB N°12. Las autoridades se dieron cuenta tarde, cuando otro elector se quejó de que las boletas estaban mojadas y con feo olor. Fue peor en Corrientes. En una mesa de la Escuela 402 Genaro Berón de Astrada, una mujer encontró restos de material fecal y varias boletas usadas como papel higiénico en un tacho de basura.
Un ejemplo de tenacidad democrática, titularon los portales de noticias sobre lo ocurrido en una escuela de de Rosario. Hasta allí llegaron dos ancianas, una más anciana que la otra. Eran madre e hija: la madre tenía 102 años y la hija, 80. La menor de las mujeres dijo sobre su madre, antes de ayudarla a ingresar al cuarto oscuro: “Sólo una vez dejó de participar en el acto electoral por una enfermedad.» Ocurrió en la escuela primaria Nº632 José María Puig.
Sucedió en la provincia de Mendoza. Una joven mujer fue a votar de blanco, vestida de novia. Afuera la aguardaban dos familiares y un auto. Minutos después de las 8, entró al cuarto oscuro. Salió, inmaculada, depositó el sobre en la urna de la mesa 51 y se subió al auto, que la llevó raudamente hacia la localidad de Tunuyán. Sucedió en la escuela «Arístides Villanueva» de la capital mendocina. “Bendecida está esta mesa, y esta escuela”, dijeron las autoridades electorales.
