Otra grave denuncia contra Lotocki, el cirujano de las famosas
Siguen cayendo denuncias contra Anìbal Lotocki, conocido como el cirujano de las famosas, que, según fuentes de Tribunales a las que accedió este medio, acumula una nueva denuncia en su contra.
Lotocki, quien se autodefine en su cuenta de Twitter como “Médico cirujano- especialista en cirugia estética-cosmética- formen en bioplastia – Director médico de Full Esthetic Center”, no es un cirujano reconocido por las principales asociaciones, así como tampoco figura en el listado de especialistas recomendados por la SACPER. Tampoco es miembro de la Sociedad de Cirugía Plástica de Buenos Aires (SCPBA) y no tendría el título habilitante de especialista en cirugía plástica que otorga el Ministerio de Salud de la Nación.
En la última semana, el cirujano de las mediáticas reapareció públicamente al haber sido denunciado por mala praxis tras operar a Gabriela Trenchi, la mujer de 48 años que permanece internada en terapia intensiva.
Nueva denuncia
El 14 de septiembre último, ante el Juzgado Civil N° 78, una mujer con las iniciales VD solciitó el secuestro de su historia clínica del centro médico de la calle Pedro Ignacio Rivera al 2900, con la intención de demandar a Lotocki por daños y perjuicios.
Según las constancias del expediente, VD, es brasilera y vive actualmente en la ciudad de Mar del Plata. Ella concurrió a Lotocki en junio de 2015 para realizarse leves retoques de cejas y papada.
En el relato de su denuncia judicial, la nueva damnificada afirma que consultó con el Dr. Anibal Rubén Lotocki «por recomendación de una amiga”, y que tras revisarla brevemente en una ocasión, el Dr. Lotocki “manifestó que se trataba de una pequeña intervención de características muy sencillas y que él podía realizarla sin nigún tipo de inconvenientes en su clínica de la calle Pedro Ignacio Rivera 2909 de esta Ciudad Autonoma de Buenos Aires».
Según la misma denuncia, el cirujano «jamás solicitó ningún tipo de estudio previo de ninguna naturaleza, pese a haber utilizado anestesia total y haber debido efectuar cortes en mi rostro».
Tras la operación, la paciente y ahora víctima del tristemente famoso médico, relata haber comenzado casi inmediatamente a notar que algo extraño sucedía en su rostro, ya que las incisiones que evidenciaba en el mismo, no se condecían con lo que Lotocki le había anticipado que le haría, siendo más numerosa y de mayor tamaño que lo que el médico había asegurado que le haría.
Consultado el profesional, éste le habría dicho que se relajara y esperara a ver los resultados de la intervención y que luego le explicaría detalladamente todo el procedimiento que le habia efectuado.
VD fue operada el 4 de junio y permaneció en la clínica menos de media hora desde la finalización de la intervención quirúrgica, siendo casi inmediatamente dada de alta por Lotocki.
Siempre según las constancias de la nueva causa, a las dos semanas de la operación, la mujer comenzó a sentir molestias que luego se convirtieron en fuertes dolores por lo que consultó con diversos especialistas del país y del exterior, quienes coincidieron en que el tratamiento al que fue sometida no resultó ser el adecuado ni coincidente con lo que la mujer había solicitado, habiendo asimismo colocado por su propia decisión el Dr. Lotocki hilos tensores de los cuales resulto alérgica, los cuales le causan a VD dolores permanentes y le quitaron casi totalmente la expresión de su rostro.
Además, en el procedimiento le hizo un corte debajo de la nariz, cambiando el formato de la boca y el cierre de la fosa nasal izquierda, generándole actualmente severas dificultades para respirar con normalidad.
Como consecuencia del procedimiento la mujer debió realizarse una nueva intervención para corregir las consecuencias de la operación realizada por Lotocki. Según fuentes allegadas se encuentra bajo tratamientos de drenajes y ultrasonidos, tratando de corregir las muy visibles cicatrices que le quedaron en las cejas y debajo del mentón y la nariz.
Consultado el Dr. Manganelli, éste ratificó la existencia de la denuncia, excusándose de hacer mayores comentarios ya que su clienta no pretende dar publicidad a su caso, sino obtener un justo resarcimiento por los daños ocasionados por Lotocki.
Anibal Rúben Lotocki se enfrenta además a tres diferentes demandas penales en las que se le acusa de estafa, lesiones graves y lesiones culposas.