Pachu Peña y su angustia
El mal trago que todavía atraviesa luego de un confuso episodio en el que fue acusado de ladrón tras haber tomado un dinero que no le pertenecía, el genial humorista continúa provocándole un cuadro depresivo.
«Como familia fue un golpe durísimo. Después del episodio de la carnicería, a la noche no teníamos ni ganas de comer», arrancó a contar el rosarino.
«Mi hija se sintió muy mal, se enfermó a raíz de esto. Yo tuve un momento en el que me empezó a doler el corazón. Dije: ‘Acá me da un infarto’. Lo pensé. Me sentí mal. Tenía ganas de llorar y el corazón destrozado. Que salga toda esa bola a matarme me hizo mierda», expresó para luego, para ExtraShow.
Finalmente, volvió a mencionar el ataque que sufrió en Twitter: «Me dolió por mis hijos, que leían todo eso. Te atacan tanto. Es un paredón de fusilamiento».